l Para desarrollar trabajos voluntarios en Queilen a partir de esta jornada, 250 alumnos de las instituciones Santo Tomás se trasladaron a Chiloé, desde diversos puntos donde estudian, desde Santiago hasta Punta Arenas.

Las labores comprenderán principalmente remozar escuelas y edificios públicos, tanto en fachada como interiores, reparación de plazas con pintura y fabricación de bancas, como igualmente se apoyará a las familias con la fabricación de invernaderos, cierres perimetrales y senderos. Además, los jóvenes visitarán las localidades de Paildad, Díaz Lira, Pureo, Apeche, Contuy y Detico. Además Nepué y San José de Tranqui. J

l Cuentas alegres sacaron en Quellón, después de realizada la décimo tercera versión de la Fiesta del Cordero Chilote y la décima Feria Ovina, en el parque municipal del sector Punta de Lapas.

Más de 10 mil personas se congregaron entre el viernes y el domingo pasado para presenciar esta muestra que además incluyó lo más variado de la cultura insular, con su música, gastronomía y tradiciones.

Una de las actividades que más llamó la atención fue el concurso "Póngale nombre al cordero", iniciativa que tuvo como ganadora a Maira Betancourt, quien bautizó al animal como "Beeeeenito", pasando ahora a ser su dueña como premio.

También el escenario fue el lugar de una demostración de esquila. El plato fuerte de la muestra fue la premiación de los ejemplares ovinos en exhibición.

Entre los reconocidos estuvieron Luis Gallardo, con un carnero raza Dorset de la agrupación El Esfuerzo de Chonchi; Inia Butalcura, con un carnero raza chilota; Sergio Avendaño, con un carnero Texel de dos años, proveniente de Quellón; Vicente Barría, con un carnero raza Suffolk también del sur de la Isla.

Otto Chaura y Juan Antonio Chiguay, fueron reconocidos por un carnerillo de raza chilota de isla Cailín. Este último premio corresponde al mejor representante de los programas territoriales (Prodesal y PDTI), siendo ellos representantes del PDTI del Consejo de Caciques de Quellón.

Finalmente, Claudio Barudy, jefe zonal de Indap, destacó "el esfuerzo de los equipos técnicos en la organización de la muestra", como también el apoyo del Ministerio de Agricultura y a todos sus organismos dependientes. J

cronica@laestrellachiloe.cl

Un giro a la seguridad ciudadana es el que están dando en la Junta de Vecinos Las Rosas, de Bonilla en Ancud. Los pobladores pretenden recuperar el espíritu comunitario de la población, mediante un sistema de alarmas.

Se trata de un proyecto ejecutado con fondos del Gobierno Regional Los Lagos, que asciende a poco más de un millón 700 mil pesos y que beneficia a la totalidad del populoso barrio, con la instalación de alarmas en 80 viviendas.

"Nosotros quisimos darle otro carisma a estas alarmas comunitarias, que originalmente son para protegerse de la delincuencia", relata la presidenta de la junta vecinal del sector, Alicia Nauco.

AVISO

La misma dirigente reconoce que si bien la protección de los antisociales siempre es una opción para el uso de estas herramientas, la principal función será dar aviso al resto de los vecinos, ante situaciones de necesidad que requieran de apoyo.

"El objetivo principal es que todos los vecinos estén conectados, unos a otros, para cuando haya algún enfermo o algún accidente ocurrido en su casa", detalla del proyecto, recordando que en el lugar existe un alto componente de adultos mayores que viven solos y también de hogares donde ambos padres trabajan y los niños quedan solos por largas jornadas.

"La solidaridad de los vecinos es lo principal cuando uno vive en comunidad y eso es lo que queremos fomentar y realzar, que volvamos a ser parte de una familia grande, del barrio, donde todos nos protegíamos, ayudábamos y sentíamos el dolor ajeno como propio", recalca la misma fuente.

En la práctica, se trata que cuando un vecino tiene un problema, apriete un botón y en 10 casas conectadas entre sí se da el aviso de dónde proviene la alerta, para poder acudir en su ayuda. "Ahí vamos a estar informados y vamos a acudir a ver qué pasa en esa vivienda", dice Nauco.

La misma representante social comenta que el proyecto fue socializado antes de postularlo y que "pasamos casa por casa contándoles a los vecinos cuál era el sentido de estas alarmas", recordando que uno de los objetivos de esta iniciativa es evitar malas experiencias anteriores.

"Tiempo atrás tuvimos una vecina que tuvo un accidente en su casa y estuvo sola, padeciendo sin que nadie la ayudara, durante tres días", explica, advirtiendo que "no queremos que esto vuelva a pasar". J