Artesanas castreñas acusan que autoridades las abandonaron
maria.nunez@laestrellachiloe.cl
A casi tres semanas que la Gobernación de Chiloé, mediante oficio, les informara que deben abandonar el espacio que ocupan en el frontis de este edificio público, la Agrupación Herederas del Viento asegura que no ha logrado "dialogar con la autoridad para trabajar una solución que no signifique menoscabo a ninguna de las partes".
"El martes oficiamos una segunda carta al gobernador para que nos pueda recibir, porque pasan los días y aún no tenemos una respuesta. También ayer le enviamos una carta al alcalde (Nelson Águila) pidiendo una audiencia para que en su calidad de autoridad nos pueda apoyar", expresó Gloria Unicahuin, vocera de la agrupación de emprendedoras.
La mujer también acusó que pese al diálogo que sostuvieron las chilotas con la ministra del Sernam, Claudia Pascual, el servicio aún no les entrega una contestación formal.
"Hemos enviados mails a la dirección regional, sin respuesta. El silencio de las autoridades no nos gusta porque tal como nosotras hemos dado la cara nos gustaría que ellos también lo hagan", acotó la representante, subrayando que "son muchas las agrupaciones ciudadanas que nos han brindado su apoyo".
Una opinión similar sostuvo la repostera María Coliahoe, quien sumó que "esta situación nos tiene muy intranquilas, pues vivimos con el temor que en cualquier momento nos desalojen y nuestras cosas vayan a parar a la calle".
"Es difícil el nivel de incertidumbre que tenemos, uno se va en la tarde para su casa y no sabe si al otro día tendrá sus cositas en la carpa. Estamos conscientes que nos tenemos que ir, solo estamos pidiéndole a la autoridad que nos apoye en encontrar un lugar donde podamos instalarnos, somos gente de esfuerzo", puntualizó la castreña.
En tanto, la artesana Alicia Contreras junto con señalar que todas las mujeres que allí laboran son las sostenedoras de sus hogares, acusó que "no entendemos la indiferencia de las autoridades".
"Estamos preocupadas, hemos hecho todo lo que está a nuestro alcance, pidiendo ayuda a las autoridades, pero nadie nos responde nada, estamos a la deriva, solo pedimos un espacio donde trabajar", dijo la creadora.
Por su parte Carolina Wood, clienta de las emprendedoras isleñas, junto con solidarizar con ellas, afirmó que "este tipo de espacios no pueden morir".
"Somos muchas las personas que aquí venimos a servirnos alguna cosita, porque son delicias a precios módicos y hechas en casa, y justamente este tipo de lugares son los que hacen falta en la ciudad. Ojalá no las desalojen y puedan encontrar un lugar donde instalarse", concluyó. J