Acreditan ultraje contra niña colocada en Familia de Acogida Especializada
La claridad de los antecedentes entregados por la víctima, como por testigos de la develación de la pesadilla que sufrió, se sumó a la prueba pericial reunida para acreditar la responsabilidad de un joven en otro aberrante ataque sexual perpetrado en la capital chilota.
El sujeto de iniciales G.P.M.S. fue condenado en los últimos días en su calidad de autor del delito de violación, en perjuicio de una niña de apenas 13 años, que había sido colocada en un domicilio asignado al FAE (Familia de Acogida Especializada) en el cual se produjo la agresión.
Es más, el acusado era el conviviente de la hija de la guardadora. Ambos compartían el mismo hogar, en el que se registró el ultraje, en julio del 2013.
Como enfatizó el fiscal Enrique Canales, la menor develó el caso en agosto de ese mismo año ante sus temores de haber quedado embarazada.
"Desde ese momento comenzó la indagatoria por parte de la Policía de Investigaciones que derivó en el juicio en que se demostró la participación del acusado en los hechos", aseveró el abogado, explicando que también incidió en esta resolución el aporte entregado por otra menor, como el testimonio del profesor de la afectada y el relato de personal del Servicio Médico Legal y del Centro de Diagnóstico Ambulatorio (DAM).
El persecutor solicitó 5 años y un día de cárcel para el joven, quien tiene irreprochable conducta anterior. Una atenuante que buscará ser utilizada por su defensa para que se imponga una pena menor, después que no lograra establecer la duda razonable, aludiendo la falta de antecedentes probatorios para configurar la participación de su representado. J