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Las más diversas miradas por su legado ecologista dejó en Chiloé la muerte del empresario estadounidense Douglas Tompkins, quien dejó de existir en el Hospital de Coyhaique por una hipotermia tras volcar en su kayak en el lago General Carrera en la Región de Aysén.
El multimillonario se hizo conocido por la adquisición de grandes extensiones en la provincia de Palena para dar vida al proyecto del Parque Pumalín, el cual encierra una superficie de 297 mil hectáreas, representando un 25% de esa zona cordillerana que alguna vez se conoció como Chiloé Continental.
Sin embargo, su visión conservacionista generó sobre todo en la década del '90 rechazo y cuestionamientos entre algunas voces nacionales por la forma en que el fundador de las marcas The North Face y Sprit adquirió predios a colonos en Chile. También posee extensas tierras en Argentina.
Alan Bannister, gerente del Parque Tantauco que administra la fundación Futuro, junto con lamentar el fallecimiento del ecologista destacó el legado que dejó con su experiencia conservacionista en la cual se inspiró y motivó el ex Presidente Sebastián Piñera al crear esta reserva privada de 118 mil hectáreas en la comuna de Quellón.
"La imagen de Tompkins fue súper relevante porque él fue uno de los motivadores para que la Fundación Futuro armara este parque; cuando Sebastián Piñera fue a Pumalín a conocer allí se motivó con la idea, es parte como de la génesis de Tantauco", dijo el representante.
El deceso del filántropo fue sentido con especial énfasis por el arquitecto castreño Edward Rojas, quien en los '90 trabajó en el diseño arquitectónico del ala norte del proyecto Pumalín en Palena.
"Tuve la fortuna de trabajar estrechamente con él en el diseño de cada uno de los proyectos involucrados en el parque que eran las casas, los refugios, la escuela, los distintos componentes de los proyectos de arquitectura", manifestó.
Añadió el profesional que Tompkins "tenía muy claro el tipo de arquitectura que quería lograr en íntima armonía con la naturaleza, es por ello que era importante trabajar con los elementos propios de la arquitectura regional".
También la joven María Paz Cárdenas evocó cuando pequeña conoció en la compañía de su padre la reserva ecológica creada por Tompkins, experiencia que le permitió echar por tierra interpretaciones y prejuicios creados respecto a su proyecto ambiental.
"Pumalín es un parque donde hay libre acceso, donde se mantiene todo intacto, donde los gringos vienen y disfrutan, mientras los chilenos no tienen idea que existe y se van para afuera, como si fuera la gran maravilla. La maravilla está aquí y él lo supo hace mucho rato, hoy se fue, y se fue de la mano de la naturaleza", reflexionó la profesional.
MINISTRO
El titular del Ministerio del Medio Ambiente, Pablo Badanier, quien participó ayer en la despedida al emprendedor en Puerto Varas lamentó las circunstancias en que se produjo su fallecimiento en la Región de Aysén.
El secretario de Estado entregó las condolencias a la familia a nombre del Gobierno valorando el legado que dejó el estadounidense al sur de Chile. En este sentido recordó que la visión de Tompkins no estuvo exenta de polémicas.
"A principios de los '90 la imagen fue de un proyecto un tanto controvertido para la realidad nacional, pero creemos que el tiempo le ha dado la razón", recalcó el personero, agregando que "hubo ciertas suspicacias injustificadas de su quehacer y hoy día se ha materializado con el Parque Nacional Yendegaia". Se trata de 150 mil hectáreas en el sector centro-sur de la isla Grande de Tierra del Fuego, Región de Magallanes.
Respecto al Parque Pumalín, el fallecido norteamericano afirmó el año pasado su deseo de traspasarlo al Estado. J