Pedro Bárcena González
Adelantando que llegará hasta las últimas consecuencias para acreditar su inocencia, un joven que se encuentra privado de libertad desde mediados de septiembre de este año en la cárcel de Castro se encuentra en huelga de hambre líquida. Esta jornada se cumplen diez días de su drástica decisión que mantiene en vilo a sus padres, quienes temen un deterioro considerable de su salud.
Álex Antonio Sotomayor Velazquez (27) está siendo investigado por su presunta responsabilidad en el delito de robo con fuerza en lugar habitado en grado de frustrado perpetrado en Chonchi. Pese a que se dispuso un plazo indagatorio de 35 días, la causa se ha extendido sin que se viese modificada la cautelar que pesa en su contra.
misiva
Tal como expresó el imputado en una carta, efectivos uniformados lo sometieron a un control de identidad y tras ser sindicado por vecinos fue aprehendido. "No puedo entender como a una persona se le toma detenida por nada, si la misma víctima dice que no le robaron nada, que se quebró un vidrio pero nunca se ingresó", indicó el joven.
Asimismo, el isleño domiciliado en el sector de Natri recalcó que el procedimiento se realizó en los instantes en que se trasladaba a visitar a un hermano fallecido en el cementerio chonchino. Además, afirmó que a la hora en que se denunció el ilícito "me encontraba en Castro y luego me dirigí a Chonchi a ver a mi hermanito que se encuentra sepultado".
Otra de las complicaciones que arguye el imputado es la extensión de la indagatoria y la falta de evidencia en su contra. Una serie de argumentos que no habría sido tomada en cuenta para sacarlo de prisión.
Esta situación tiene muy complicados a sus padres. Como resaltó José Sotomayor, a su hijo lo capturaron solo por el peso de su pasado delictivo. "Solo por tener antecedentes lo culpan de algo que nunca cometió", aseveró, a lo que agregó su esposa Sandra Velazquez, que "todo esto es una discriminación por parte de Carabineros y de la gente que dijo que él había sido... todo esto por su pasado".
Antes de enfrentar estos nuevos cargos por un delito de apropiación, el chonchino se encontraba ayudando a su madre en su casa. "Se estaba portando bien, era el único hijo que me ayudaba, más ahora cuando tuve un accidente cerebro vascular", comentó con angustia.
salud
La pareja está preocupada por la salud del joven, manifestando que "dice que llegará hasta el final. Podría dejar de tomar líquidos y hasta lo pueden trasladar a Puerto Montt. La situación es muy difícil, por lo que pedimos a la Fiscalía que acelere todo y se llegue a la verdad, puesto que estamos seguros que Álex no hizo nada".
Desde el plano indagatorio, la causa está en su última fase. Como aseveró el defensor Juan Manuel Castro, está fijado para el 29 de este mes el cierre de la investigación.
"Estamos a la espera del informe de la Sección de Investigaciones Policiales (SIP) de Carabineros por la reconstitución de escena que se realizó en este caso. Esta diligencia extendió los plazos que estaban acotado para poco más de un mes", aclaró el abogado.
Asimismo, el profesional reconoció que se llegaría a juicio oral, aunque su postura sería la de una figura delictiva distinta a la cual se le imputa al joven: la violación de morada y daños. Ello, aunque el joven insiste en que no tuvo interacción alguna con el domicilio atacado. J
Desde el Centro de Detención Preventiva de Castro confirmaron la manifestación realizada por el imputado. Como recalcó el alcaide subrogante, suboficial Pedro Jara, desde el 7 de diciembre que está en huelga el joven, "permaneciendo estable y con constantes y diarios controles por parte de nuestro paramédico". Además, recalcó que no ha sido necesario llevarlo hasta el Hospital Augusto Riffart, aunque no se descarta esto a futuro si su condición empeora.
En cuanto a un eventual traslado al Complejo Penitenciario Alto Bonito de Puerto Montt, Jara indicó que "depende de su estado de salud. Entonces, se oficia al tribunal para ver su traslado a un recinto que ofrezca garantías de atención sanitaria".