El gimnasta chileno Tomás González clasificó en la octava posición a la final del salto tras una buena actuación en esta especialidad. Sin embargo, esto fue una sorpresa para el chileno ya que este aseguraba primero su paso en suelo, donde quedó eliminado luego de una bajísima puntuación de 15.066.
El santiaguino ya lo tenía asumido cuando habló con los medios. Y llegó la confirmación que lo dejó fuera de la final de suelo en los Juegos Olímpicos de Río 2016. Así, se despide del sueño de medalla en esta prueba, esa que le fue esquiva también en Londres 2012. Y todo por la baja puntuación que le dieron los jueces. Esto provocó toda su ira contra los encargados de puntuarlo.
"Fue un robo. Es algo contra mí o contra cualquier amenaza de los más conocidos. Después los jueces salen con grandes regalos y relojes y premios de agradecimiento (...) Los hacen después de la competencia. Pasa en todos los deportes de apreciación, hay muchas influencias detrás y, bueno, estamos en Brasil", acusó.
Críticas
El deportistas lanzó sus dardos contra el favoritismo que existió de parte de los jueces en favor de los locales.
"Todos pueden ver que Brasil quedó a un punto de Japón, lo cual es casi imposible. Pero ellos organizaron estos juegos Olímpicos y hay que acatar las normas", continuó el chileno. "Quedé un poco decepcionado, porque este deporte es de mucha apreciación y creo que el descaro fue muy notorio. No me esperaba bajo 15,2 o 15,3. Pero no se puede hacer nada cuando los jueces se ponen de acuerdo", expresó. "Yo creo que sí, fue un robo. Si lo hacía sin ningún error obviamente podía meterme a la final, pero la gimnasia es así, un deporte un poco ingrato, pero el mejor", alegó el nacional.
Sin embargo, el chileno no terminó sus críticas hacia la falta de apoyo de parte del Estado y de la federación a la cual pertenece.
"Se sabe que en los jueces siempre hay un tema de lobby atrás. Al no tener un apoyo estatal o una gran federación, uno está solo compitiendo contra todo China, todo Rusia, todo Estados Unidos; entonces siempre es difícil y sabía que tenía que hacer una rutina casi perfecta. De esos pequeños errores ellos se agarran para descontar lo máximo posible", complementó.
Pese a ello, el chileno quedó conforme con su participación en salto, donde mantiene chances de poder lograr una presea.
"Cerré de la mejor manera con salto, desde el año pasado de mi lesión de tobillo que no competía. Volví con mi salto más difícil, doble carpado hacia atrás, y creo que quedaré muy bien ranqueado, pero cerré de la mejor manera esta clasificación olímpica en salto y estoy contento por volver a competir. A mí nunca me han regalado nada. Antes si se hacía como cortesía de los equipos", comentó el atleta nacional que terminó ayer con polémica.