Pamela Serey A. - Medios Regionales
La paciencia se acabó. Los hinchas ya no quieren más ensayos ni soportan las derrotas.
Así se lo hicieron sentir los fanáticos que se toparon con el regreso del plantel en el aeropuerto. El primero en sacar la voz fue un taxista, Julio Riquelme, quien se acercó al entrenador y le pregunto: "Usted es de la U?". Ante la consulta Sebastián Beccacece no respondió. Siguió caminando, tratando de apurar el paso, con las manos en los bolsillos. "Da un paso al costado, viejo. Da un paso al costado", agregó Riquelme.
En ese momento apareció Luis María Bonini alzando la voz y tratando de alejar al taxista del DT. "Perdón, perdón", decía el preparador físico, abriendo los codos. A lo que Riquelme replica diciendo: "Eso no se hace". Y luego añade: "No te he faltado el respeto en ningún momento, viejo". Pero Bonini no se cayó y le dijo: "Me tropezaste, me tropezaste". De inmediato, la respuesta se escuchó fuerte y clara: "Eres mala clase y más encima, no sabes de fútbol".
Eso se suma a los rayados que aparecieron después de la derrota de Universidad de Chile frente a Universidad Católica en la final de la Supercopa, en el Complejo Deportivo Azul.
"Ándate Beccacece (...). Mójela", sumado a unos garabatos, era lo que se leía en el portón del centro. Y ese era el segundo en una semana contra el DT. "Fuera Becacheques", decía el anterior. Es más, los guardias de la U tienen un tarro con pintura a la entrada para tapar de inmediato, cuando se vea alguna manifestación de ese tipo.
Fanaticada famosa
Una fiel hincha de Universidad de Chile es la periodista Scarleth Cárdenas y está de acuerdo con el taxista del aeropuerto, pues también pidió la salida del argentino.
"Si Azul Azul no lo remueve por dinero, es un fracaso de ellos también. Pero yo -en su lugar- dejaría de cobrar ese saco de millones por hacer la práctica y me voy a casa pidiendo perdón. Y no más tiempo para ensayar a ser entrenador", afirmó.
Una opinión distinta tiene otro hincha azul, Eduardo Fuentes, quien piensa que sería complejo sacarlo ahora, "por lo que podría pasar con la U en el futuro cercano. No sé si sea responsable por la cantidad de dinero que hay que pagar. Es plata que a la U no le sobra", indicó.
Claro, para sacar a Beccacece del banco, Azul Azul debe desembolsar 2 millones de dólares. La única forma de no pagarle nada, sería si el estratega presenta su renuncia. Algo, que ya advirtió, no hará. Él quiere seguir hasta diciembre, porque todavía tiene la esperanza de revertir la situación.
"Yo -en su lugar- dejaría de cobrar ese saco de millones por hacer la práctica y me voy a casa.
Scarleth Cárdenas, periodista."
2 millones de dólares tiene que pagar Azul Azul para terminar el contrato con el deté.