Ricardo Soto entrena duro en busca de una medalla
En la "selva" de Arica tiene su cuartel general este promisorio arquero.
En el extremo norte del país, a tan sólo cuadras de la Playa Chinchorro se encuentra la piscina olímpica de Arica. El lugar llama la atención no sólo por su tamaño, sino por un pequeño terreno ubicado a un costado. Un lugar que a simple vista casi parece desértico, pero es ahí donde se prepara día a día la gran promesa olímpica del deporte chileno.
En aquel terreno se encuentra la cancha donde el arquero Ricardo Soto, quien cumplió una destacada participación en los recién pasados Juegos Olímpicos de Río, entrena a diario con la meta puesta en Tokio 2020. Ya estando en el lugar se pueden apreciar los parapetos colocados a diferentes distancias, cada uno preparado para las distintas categorías de las competencias oficiales: 70, 60, 50, 40, 25 y 5 metros para comenzar a calentar. Pero no sólo eso. A pesar de que el piso es de tierra, las líneas que separan los diferentes carriles (lugar destinado para que un arquero dispare) se pueden apreciar con facilidad, aunque en varios sectores de la cancha se pueden ver manchones de pasto y algunos árboles que "ensucian" el lugar.
"Eso es lo que va quedando. Esto antes era una 'selva' prácticamente", señala David, el hermano y formador de Ricardo Soto. "Nosotros con mi hermano trabajamos mucho para poder tener esta cancha. Antes esto estaba lleno de maleza, árboles, pinos y tuvimos que sacarlo todo para poder dejarlo como está ahora", confiesa Soto.
Frutos
Y el duro trabajo realizado por Ricardo Soto y su familia rindió sus frutos. Hoy la cancha de Arica está en óptimas condiciones para la práctica del tiro con arco. De hecho, cuenta con las medidas oficiales e incluso "puede albergar un campeonato panamericano sin problemas", confiesa Alfonso Bórquez, presidente de la Federación Chilena de Tiro con Arco (Fechta).
Las condiciones climáticas que entrega el norte del país influyen para el desarrollo de la arquería. Esto porque el viento es bastante fuerte en esta región, un aspecto el cual aseguran es necesario acostumbrarse y dominar a la hora de competir.
"Lo único que detiene una competencia son rayos, menos 5 grados bajo cero y sobre los 48. Con lluvia, viento o lo que sea se compite igual", asegura Soto, quien es la promesa del deporte olímpico chileno.