Gabriela Mayorga Oyarzo
Una orden de demolición contra la construcción de un colegio particular en el sector de Llau Llao concretó el consistorio de Castro por reiteradas infracciones cursadas (más de una decena), debido a que hicieron caso omiso de los permisos municipales respectivos y, además, no acataron las reiteradas órdenes de paralización de la obra.
La edificación corresponde a un colegio de la ONG Waldorf Newen que en la actualidad funciona en Nercón, pero que el año pasado comenzó a construir un espacio en Llau Llao, causando la molestia de un grupo de vecinos. El reclamo se centró en su momento en las dificultades de la comunidad para transitar por el sector, ya que el camino de acceso al colegio se ubicaría entre la escuela Pedro Velásquez Bontes y la sede del Club Deportivo Llau Llao.
Asimismo, al momento de iniciar los trabajos del recinto no se contaba con el permiso de la Dirección de Obras, por lo cual el municipio notificó a los responsables, en este caso a la ONG, de paralizarlos. Pese a ello y de manera reiterada, las órdenes no se acataron, lo que llevó a tomar la drástica decisión.
El alcalde Juan Eduardo Vera, confirmó que ya está firmado el decreto que ordena la demolición del recinto. "En nuestra comuna hay reglas, ordenanzas. Aquellos que no las respeten tendrán que asumir las consecuencias, estamos aplicando la ley que nos indica que cuando una construcción se realiza en forma irregular, la obligación del alcalde es hacer los trámites de rigor y si no se respetan esas órdenes, la decisión final es la demolición", argumentó.
Disculpas
Desde la otra vereda, María José Lira, representante de la ONG Waldorf Newen, pidió disculpas públicas a la autoridad comunal, a la Dirección de Obras y al Juzgado de Policía Local, por no haber paralizado con anterioridad las faenas.
"Hace aproximadamente 15 días se paralizaron las obras y si no lo hicimos antes respondió a que teníamos materiales ahí, que se consiguieron con mucho esfuerzo a través de préstamos y donaciones y sentíamos una tremenda responsabilidad por resguardar todos estos materiales, dejar cerrado, para que esto no estuviera en peligro de irse destruyendo, con el clima entre otras factores", explicó.
A pesar de esto, la ONG quiere seguir regularizando los permisos para que el proyecto siga en pie. "Ojalá el municipio nos apoye, nos dé plazo para que terminemos de regularizar los permisos que ya están ingresados", instó Lira.
Es así como un vecino del sector de Llau Llao, Héctor Bahamonde, ofreció la posibilidad de abrir un camino alternativo, tema del cual tiene conocimiento la comunidad que había manifestado su molestia al respecto.
"Traté de apoyarlos y darle solución permitiendo que el camino de acceso pase por mi predio, ese es mi aporte como ciudadano para tratar de que el colegio no se vaya a otra parte, sino que continúe en Llau Llao", detalló el poblador.
Esta es la solución que la ONG espera sea acogida por el municipio de Castro. Por ahora el establecimiento seguirá funcionando en el sector de Nercón, mientras mantienen la esperanza de llegar a algún acuerdo con las autoridades.