Michael Seguel P. - Medios Regionales
Luis Morales es administrador público y cuenta que padece un mal de muchos, en Chile: "Soy muy optimista y no calculo el tiempo para llegar a ninguna parte".
Esta es una característica que lo hace llegar tarde a reuniones y al trabajo, algo que, dice, no lo complica demasiado: "Hay mucha tolerancia a la impuntualidad. Es como un acuerdo tácito entre las personas".
Una afirmación que podría estar más equivocada de lo que sospecha, ya que, cada vez más, la puntualidad es un factor relevante en la evaluación de los empleados, de diferente nivel, en el país.
Así que, para que usted no quede en el grupo de los impuntuales, expertos consultados por La Estrella le entregan consejos para llegar a la hora.
Anticipe en la noche
"Todo lo que pueda planificar antes, ayudará a llegar temprano", dice la psicóloga laboral del GrupoExpro, Nélida González.
Para la experta, lo primero es decidir en la noche previa la ropa qué usará al día siguiente.
Suma que bastará con dedicar 10 minutos a elegir los zapatos, camisa y corbata que se utilizarán en la jornada siguiente, en el caso de los hombres; o los zapatos, pantalones y vestidos, en el caso de las mujeres.
Carlos Baeza, director de Business Solutions en Adecco, recalca que la planificación es clave para aprovechar mejor el tiempo: "Se debe planificar el día de trabajo y dejar un margen de tiempo extra por cualquier contingencia que se pueda tener, con el objetivo de cumplir con los horarios establecidos".
Despertador
Un momento que puede marcar la diferencia entre llegar a la hora o atrasarse, es cuando suena el despertador.
Los especialistas desaconsejan utilizar la opción de escuchar el despertador y seguir durmiendo cinco o 10 minutos más, por tentador que sea.
"Hay que identificar a dos tipos de personas: las que tienen solo una alarma en el celular y que no se levantan de inmediato, y las que tienen muchas alarmas y que igual se despiertan tarde", apunta González.
La psicóloga laboral recomienda no tener más de tres alarmas para despertar, en un lapso de 15 minutos, como máximo. Si no se levanta con toda esa ayuda es porque, probablemente, no irá a trabajar.
Cronometrarse
Otra recomendación es tomar el tiempo de cuánto tarda en levantarse, ducharse y tomar desayuno.
"Es bueno saber cuánto se demora una persona impuntual en un grupo de tareas, antes de ir al trabajo. Así, sabrás cuánto es el tiempo mínimo que se debe considerar no solo para levantarse, sino que para salir de la casa y comenzar el traslado hacia la oficina", mencionó González.
Esto le ayudará, además, a tener un margen si es que no preparó nada la noche anterior y tiene que, por ejemplo, que planchar una camisa u ordenar su mochila o cartera.
suponga que hay taco
Tomar el tiempo de cuánto se va a demorar en llegar al trabajo es una recomendación central, independiente de si llega caminando, en bicicleta, transporte público o automóvil.
"En Chile, tenemos la 'mala fama' de ser impuntuales y no solo en el ámbito laboral, también en eventos sociales, en el ámbito personal, es un comportamiento cultural llegar atrasados", reconoce Carlos Baeza.
Una buena forma de evitar esto es calcular cuánto demorará su traslado en un día sin tráfico, cuánto en un día regular y cuánto en un día con taco, y partir de la casa suponiendo que encontrará el peor escenario. En otras palabras, no corra riesgos.
Dar el ejemplo
"La ansiedad y el estrés es lo que provocará siempre que una persona llegue tarde a la oficina", asevera González.
Una recomendación de los expertos, en caso de llegar tarde a una reunión, es evitar solicitar de inmediato un resumen de lo que se habló. Es decir, no obligar al jefe o a los compañeros a repetir todo lo que dijo solo porque usted se atrasó unos minutos.
"También es importante que las jefaturas sepan que son justamente los jefes quienes tienen mayor responsabilidad de llegar a la hora. Hay que predicar con el ejemplo", acota Baeza.
"Es bueno saber cuánto se demora una persona impuntual en un grupo de tareas, antes de ir al trabajo. Así, sabrás cuánto es el tiempo mínimo a considerar".
Nélida González,, psicóloga laboral."