Le costó sangre y sudor instalarse en las semifinales del Mundial de Rusia, pero pudieron cortar 20 años de sequía sin alcanzar esta instancia.
Croacia superó en un épico partido a Rusia y enfrentará a Inglaterra en la ronda de los cuatro mejores de la cita planetaria. Pero necesitó de la definición de los penales, donde se impuso por 4-3, para dejar eliminado a un aguerrido dueño de casa.
Denis Cheryshev abrió la cuenta a los 30' con un zurdazo desde 30 metros que dejó parado al portero Danijel Subasic. Sin embargo, Croacia consiguió empatar rápido gracias a un cabezazo de Andrej Kramaric (39').
En el período suplementario, parecía que el cuadro de Zlatko Dalic se quedaba con la gloria y no iba a sufrir más cuando Domagoj Vida cabeceó y venció al meta Akinfeev a los 100'. Rusia no bajó los brazos y por intermedio de Mario Fernandes a los 114' colocó el definitivo 2-2 y forzó la definición a penales.
Desde los 12 pasos, Croacia fue más efectivo y también tuvo a Subasic como figura al tapar uno de los disparos lanzados por los locales.
Los balcánicos vuelven a los cuatro mejores de la Copa del Mundo tras su participación en Francia 1998 en la que se quedó con el tercer lugar.
A su vez, Inglaterra no brilla, no es atractivo para los que gustan de la estética en el fútbol, pero en base a una notable efectividad en las pelotas paradas y en el juego aéreo se metió en una semifinal de un Mundial tras casi 30 años.
Superó por 2-0 a Suecia en el penúltimo choque de los cuartos de final y ahora espera por Croacia en la ronda de los cuatro mejores del torneo que se está desarrollando en Rusia. La última vez que alcanzó esta instancia fue en la Copa del Mundo en Italia 1990.
A los 30' del primer tiempo Harry Maguire abrió la cuenta con un certero cabezazo tras un tiro de esquina.
En el complemento, Suecia esbozó una reacción, pero se encontró con la tremenda figura del portero Jordan Pickford. Con tres rapadas, el arquero del Everton evitó que los escandinavos se ilusionaran.
Y en ese tanto ir, Inglaterra clavó la lápida a Suecia con otro cabezazo, esta vez de Dele Alli a los 58 minutos. Tras esa conquista, el cotejo ya quedó sentenciado.