Pedro Bárcena González
Utilizando el mismo modus operandi, una segunda mujer en menos de una semana fue sorprendida por personal de Gendarmería ingresando sustancias ilícitas al Centro de Detención Preventiva (CDP) de Castro. La joven no solamente fue detenida por este delito, sino también fue condenada y se le prohibirá el ingreso a unidades penales del país.
El dispositivo se gestó tras el seguimiento realizado a la sospechosa de estas prácticas. Información la sindicaba como una de las responsables de introducir droga y dinero dentro del recinto de calle Monjitas. Y los datos se comprobaron.
Pese a superar los controles externos, como la máquina de rayos X, la inspección con la paleta detectora de metales y la revisión superficial de sus vestimentas, la imputada de iniciales Y.B.M.G. (37) no salvó de las últimas fiscalizaciones de los uniformados.
Siempre apoyados por el sistema de cámaras de seguridad, se esperó que la visita se reuniera con el recluso, identificado como H.G.O.M. (33). Al finalizar este encuentro activaron los protocolos de allanamiento.
Al sujeto que cumple condena por el delito de lesiones graves gravísimas se le encontraron tres bolsas de nailon que mantenían en su interior marihuana. Tras esta inspección fue remitido a la guardia interna del penal, donde esperó la llegada de personal de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim), que se encargó de las primeras diligencias.
Los detectives desarrollaron el narcotest arrojando la prueba positivo para Cannabis sativa. En total, se incautaron 17,9 gramos de la hierba. Ante el peso de estas pruebas, la mujer fue detenida y puesta disposición de la justicia.
Como aclaró Carlos Olavarría, alcaide del CDP castreño, el dispositivo realizado al interior del centro carcelario "respondió a los protocolos diseñados para estos casos, en los cuales se manejan antecedentes provenientes de los mismos internos, las visitas y hasta las policías, para seguir a quienes buscan introducir sustancias ilícitas y dinero a la unidad".
Audiencia
Todas las evidencias recogidas fueron remitidas al Ministerio Público para judicializar la causa. La abogada asistente Katherine Fierro se encargó de formalizar por microtráfico a la encartada, quien reconoció su participación en los hechos y hasta prestó colaboración en las diligencias, ante lo cual accedió a un requerimiento verbal simplificado.
Tal como expuso el defensor Juan Manuel Castro, su representada entregó autorización voluntaria para el registro de su domicilio en la capital chilota. Al interior de la vivienda se incautaron otros 45 gramos de marihuana.
"Junto a la irreprochable conducta anterior se suma como atenuante la cooperación en el esclarecimiento de los hechos. Por ello, accedió a una pena rebajada de 61 días de presidio remitido", acotó el abogado.
La magistrada Alejandra Varas dictó el fallo que implicará que la mujer firmará mensualmente por un año ante el Centro de Reinserción Social de Castro.
Medida
El capitán Carlos Olavarría dijo que se decretarán medidas administrativas, ya sea internas con respecto al recluso que está preso desde el 21 de marzo de este año en el CDP de Castro, como también a la visita. "Al igual como fue en el caso de la mujer anterior, como facultad del alcaide se le prohibirá a esta joven ingresar a unidades penales del país por el plazo de dos años", dijo, explicando que la medida responde a la gravedad del hecho (microtráfico) que atenta contra la salud de los internos.