Satisfecho y complacido, tanto por la posibilidad de realizar conciertos en las iglesias patrimoniales de Chiloé, así como por la masiva asistencia que tuvieron sus presentaciones en Dalcahue, Chonchi, Castro y Ancud, dejó el Archipiélago el destacado pianista nacional Roberto Bravo.

Prometiendo volver para repetir la experiencia, el maestro se refirió al desarrollo musical de la Isla y pudo conocer a jóvenes promesas del piano de las diferentes ciudades chilotas.

"Fue una idea que afortunadamente fue bien acogida por todas las instituciones que han apoyado este viaje. El encuentro con la gente fue muy lindo, el encuentro con los niños fue muy emotivo y la participación de la Orquesta de Chonchi, bueno, estoy enamorado de esa orquesta así que los acabo de invitar a participar conmigo de algún concierto en Santiago, si el alcalde de Chonchi me ayuda en eso", sostuvo.

El músico, quien fue alumno de Claudio Arrau, valoró durante su estadía en Chiloé a los jóvenes talentos pianísticos de la Isla y manifestó que "debemos hacer una alianza con Puerto Montt para traer a una pianista rusa, que ya ha estado en esta zona, que tiene programas pedagógicos muy interesantes que serían muy útiles para los niños y profesores de la región. Estamos en eso", aseguró.

promesas

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En su visita, Bravo escuchó a algunas promesas musicales pertenecientes a la Academia de Artes Islas al Sur de Castro, dirigida por el músico Gabriel Coddou, y a miembros de la Orquesta Juvenil de la Corporación Municipal de Ancud a cargo del también pianista, Alfredo Chatruc.

"Hay muchos niños talentosos y muchos niños que quieren participar (en Chiloé). Por eso creo que hay que fortalecer todo lo que sea la parte cultural en el terreno de la música, porque la cultura de Chiloé está siempre aquí", aclaró.

Finalmente, el reconocido instrumentista afirmó que en su visita por el Archipiélago "me ha encantado todo lo que he visto, los paisajes y las comidas, por ejemplo. Además, hay una energía muy linda en la Isla también".