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La Ruta de las Iglesias encanta a los viajeros y cada día cobra más fuerza turística en Chiloé

Desde Ancud comienza esta travesía cultural llena de la magia de estas construcciones religiosas.

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l César Cárdenas Ruiz

El proyecto denominado la Ruta de las Iglesias, partió el 2010, mediante la iniciativa de la Fundación Amigos de las Iglesias de Chiloé, organismo sin fines de lucro que tiene como finalidad, preservar el patrimonio cultural relacionado con los templos insulares, tipificados dentro de la Escuela Chilota de Arquitectura en Madera.

Las construcciones religiosas más antiguas, todavía en pie, datan de mediados del siglo XVIII y las más recientes, del primer tercio del siglo XX, producto del oficio de los carpinteros y la voluntad de las comunidades por trabajar unidos por una causa común. Esta tradición centenaria ha ayudado a forjar a lo largo de los años la identidad chilota, reconocida y apreciada en el mundo entero.

La Ruta de las Iglesias se ha transformado en una nueva forma de recorrer la provincia, además de convertirse en uno de los mayores atractivos turístico de Archipiélago, proponiendo cinco ejes para conocer algunas de las edificaciones patrimoniales más significativas y, de paso, deleitarse de los mágicos paisajes que ofrecen los poblados locales.

En Chiloé quedan aproximadamente 70 iglesias que responden a esta tipología y que han sobrevivido al paso de las décadas y las inclemencias climáticas. Hoy, 16 de ellas lucen el título de Patrimonio de la Humanidad otorgado por la Unesco.

"Estamos muy contentos porque la demanda turística es cada vez mayor, hay mucha gente que está interesada en conocer el legado patrimonial de las iglesias de Chiloé, así que la buena noticia es que este verano hemos logrado articular nuevos centros de visitantes, además del que tenemos en Ancud con esta muestra de las iglesias restauradas", señaló Cristián Larrère, director ejecutivo de la Fundación Amigos de las Iglesias de Chiloé.

Bajo esta misma línea, el profesional señaló que a futuro, además de la restauración, se espera seguir levantando nuevas infraestructura.

"Estamos preparando dos nuevos centros de visitantes para que los turistas puedan llegar directamente hasta allá y aparte entender todo el proceso de construcción y el contexto histórico de estas iglesias", aclaró el ingeniero.

Asimismo, enfatizó que los viajeros "van a poder visitar directamente una iglesia restaurada y lo más interesante es que estos centros de visitantes, van a estar abiertos todo el año, es decir ya no va a ser solo una iniciativa de temporada alta, si no que el turista va a poder venir todo el año a Chiloé y conocer nuestras iglesias patrimoniales".

El trayecto comienza en Ancud, específicamente, en la ex capilla Inmaculada Concepción. Aquí existe atención gratuita para los visitantes y se obtiene una acreditación y una guía impresa con todas las instrucciones del recorrido, que cubre 10 iglesias pertenecientes a la Escuela Chilota de Arquitectura en Madera, incluyendo cinco de las 16 nombradas Patrimonio de la Humanidad.

Se recibe además una credencial, que permite una atención preferencial en las iglesias más relevantes de la ruta y una charla general a cargo de guías acerca de la historia de las iglesias, entregando datos de interés y desmitificando algunas creencias populares.

Bajo esta premisa la misma fuente añadió que "el punto de partida para hacer una buena ruta de las iglesias de Chiloé, es Ancud. En nuestro centro de visitantes existe esta muestra, donde el turista puede entender el contexto de las iglesias, maravillarse y sensibilizarse para que después cuando las vayan a conocer, sepan exactamente dónde están, qué horario de atención tienen, qué características tienen y pueda llevarse una buena experiencia".

Desde Ancud, se inicia camino por la Ruta 5 Sur hasta llegar a Quemchi, el trayecto continúa en dirección sur hasta llegar a localidad donde se encuentra la primera de las iglesias Patrimonio de la Humanidad: San Antonio de Colo, que está algo aislada y por eso su acceso es un poco más complejo que al resto de los templos.

La aventura sigue hacia el sur, hasta el poblado de Tenaún. Posteriormente, el camino continúa en dirección oeste. Hay que desviarse levemente de la carretera que lleva hacia Castro para llegar a San Juan, cuya iglesia es una de las que más fielmente ha mantenido su estructura original.

Seguido de esto hay que continuar hasta Dalcahue. Su iglesia está ubicada frente a la plaza. Desde este punto de la Isla se puede optar por seguir hacia la isla Quinchao, para ver los templos patrimoniales de Achao y Nuestra Señora de Gracia de la villa quinchaína, o bien, continuar hacia Castro.

Kay Höhner, turista proveniente de Alemania, poseedor de un español no muy fluido, se las arregló para manifestar su admiración por estas emblemáticas construcciones religiosas de esta parte del mundo.

"Realmente maravilloso lo que se puede encontrar en este lugar de Chile, tan lejano, pero con tanta magia, las iglesias son realmente fantásticas, hemos conocido solo unas pocas, y hemos tomado muchas fotografías para guardar este recuerdo, hay mucha historia en este lugar y es misión de ustedes poder cuidarlos siempre", indicó el europeo.

Otro de los forasteros que entregó su opinión de estos templos ancestrales fue Andrés Pereyra, quien desde la Argentina, viajó hasta la Isla Grande, para conocer entre otros atractivos, estos patrimonios de la humanidad.

"Todo fantástico, son pocos los lugares de Latinoamérica, del mundo creo, donde se pueden encontrar estas construcciones tan antiguas y llenas de historia para los chilenos, es una tremenda inversión venir de vacaciones hasta acá", expresó.

Pamela Vidal, quien viajó desde Rancagua, dice venir hasta Chiloé todos los veranos y así mostrar a sus familiares estas construcciones. "Uno nunca se cansa de deleitarse de Chiloé, es un lugar con un encanto infinito, los paisajes, la comida y sobre todo las construcciones antiguas como son las Iglesias. Debemos sentirnos orgullosos los chilenos en general, de que sean Patrimonio de la Humanidad", puntualizó.

En Castro se pueden conocer otras iglesias pertenecientes a la Escuela Chilota, como la de Astillero y Llau Llao. En la capital provincial se presenta otra estructura considerada patrimonio, la iglesia de San Francisco de Castro.

Aunque la capital insular es un buen punto final de la ruta, se puede continuar el periplo en busca de otras iglesias cercanas, como las que se encuentran en las localidades de Nercón, cuya torre y fachada fueron dañadas por los embates del tiempo, pero que este pasado año 2013 fue entregada completamente restaurada.

También está Rilán que, por el contrario, es una de las que se han mantenido mejor conservadas. J