Secciones

El paso adelante del Centro de Documentación

Iniciativa puso recientemente online un catálogo con parte de los textos existentes, en Cedarchi.cl.

E-mail Compartir

l Pedro Andrade Araos

Acorde a los tiempos modernos, en que la web es uno de los principales soportes de comunicación y uno de los más difundidos en el mundo, estar fuera de ella es prácticamente sinónimo de no existir.

Cada día, son más y más las iniciativas que de una u otra forma se han volcado a la plataforma virtual, de modo de expandir su radio de alcance y acción.

Chiloé, con su riquísimo mundo de tradiciones e historia, cuenta con uno de los archivos bibliográficos más interesantes que ilustran gran parte de la vida de los habitantes de este territorio y que recientemente ha puesto en línea gran parte de su material almacenado en el Centro de Documentación Archivo Chiloé, a través de su portal Cedarchi.cl.

El establecimiento, que funciona desde 1996, reúne un número indeterminado de documentos (más de 5 mil) que incluyen libros, revistas, diarios y material audiovisual relacionados con el Archipiélago, su historia y cultura.

Desarrollado en sus inicios por destacados gestores locales como Dante Montiel y Renato Cárdenas, entre muchos otros, cuenta con dos grandes secciones para su consulta: una bibliográfica y otra documental.

El primero, contiene obras de cultura general; mundo indígena; fuentes éditas (textos antiguos reeditados); estudios históricos y sociales; turismo, desarrollo y medioambiente, e indiferente general, donde se encuentran aquellos textos que no caben en las clasificaciones anteriores.

Mientras, en la sección documental, se hallan la hemeroteca, el archivo fotográfico, audiovisual y los microfilms, estos últimos con registro de periódicos locales de todo el periodo republicano, así como muestras de otros periódicos atingentes, pero publicados en otras ciudades del país.

Se destacan en esta categoría, los registros parroquiales de diversas localidades de Chiloé, donde es posible encontrar fuentes para realizar análisis genealógicos de familias de Achao, Castro, Chonchi, Dalcahue, Ancud, Quemchi, Chelín, Calbuco, Puqueldón y Ancud, entre 1708 y 1902.

"Hasta el 2000 teníamos una base de datos en Word, esa era la única forma de consulta que teníamos y estábamos bastante desordenados en ese sentido", manifiesta el castreño Nelson Torres, a cargo del archivo ubicado actualmente en dependencias de la Biblioteca Municipal Martina Barrientos Barbero de Castro.

Sin embargo, al inicio del presente año dos jóvenes integrantes del proyecto Chiloe 1826, Gonzalo Aravena e Ignacio Ibáñez, se acercaron al lugar y tras conversaciones con las autoridades locales comenzaron a trabajar durante los meses de enero y febrero en el registro online del catálogo.

"En la parte de difusión y contacto con los usuarios, lo que hicieron fue muy bueno. Implementaron un programa de consulta y registro que se puede consultar por internet, haciendo mucho más rápido acceder a un libro", precisa Torres.

Similar opinión comparte Dante Montiel, uno de los gestores de este verdadero espacio cultural, quien agrega que este "es un paso trascendental, porque hasta el momento los estudiantes y profesores han compilado solamente lo que se refiere al tema de historia y algunos aspectos relacionados con la cultura, pero falta todavía más de la mitad para poder terminar de incorporar los textos".

El docente destaca el avance en el registro online a tal punto que "nos están llegando una serie de informaciones y opiniones agradeciendo por lo que se hizo, porque es una plataforma electrónica enormemente importante para su estudio a futuro, así que yo diría que es un avance trascendental", sostiene.

De un total de 5 mil 522 libros contenidos en Cedarchi, sólo mil 499 han sido ingresados hasta el momento al catálogo. Así también, se aprovechó en la ocasión de establecer nuevos criterios de inclusión del archivo, depurando los textos que no correspondían a creaciones de y sobre Chiloé, cifra que alcanzó los 2 mil 23 libros.

"Especializamos el tema. Durante mucho tiempo el archivo funcionó como una biblioteca y en la cual se podían encontrar ahí textos no solamente de temáticas sobre Chiloé. Lo que ahora hicimos fue depurar esa información y especializarla solamente en función de temáticas chilotas, relacionadas con estudios o documentos sobre chilotes", explica Gonzalo Aravena, de Chiloé 1826.

Sobre los documentos y libros no catalogados como parte del centro de documentación, Aravena indica que se está "viendo si podemos traspasarlos a la biblioteca, o ver ciertas modalidades para que también queden a disposición del público. Lo que sacamos no es material malo, o sea no es que no sirva, en ningún caso, sino que simplemente no tiene el perfil que requiere un centro de documentación chilote, no es más que eso", aclara.

Si bien, todos los actores reconocen que la implementación de la consulta en línea del catálogo de Cedarchi es un gran paso en pos del resguardo y difusión del patrimonio cultural del Archipiélago, todos también coinciden en que aún quedan grandes desafíos.

"Aún hay mucha pega por hacer y falta mucho por trabajar. Yo diría que este es el primer paso y ojalá se pueda concretar con el apoyo financiero de parte de la municipalidad y de la corporación para poder terminar este trabajo que ya se inició, más aún, al considerar que el archivo es uno de los espacios documentales más importantes, yo diría del país, en relación a una cultura específica como es Chiloé", asegura Montiel.

La información del catálogo puede revisarse a través de la web Cedarchi.cl, o directamente en las dependencias de la biblioteca de lunes a jueves de 10 a 13 horas y de 15 a 19 horas, y el viernes de 10 a 13 horas y de 15 a 18 horas.

Así también, su puede estar informado de las diferentes actividades por medio del Facebook Cedarchi y el Twitter @Cedarchi. J