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Mena sigue rompiendo con las estadísticas

Jugando lo justo y necesario, sin derrochar un talento exquisito, suma ya once títulos con el club.

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l Roka Valbuena

Luis "Multicampeón" Mena ya es un fenómeno: sin hacer alarde de ningún talento sobrenatural, jugando lo justo y necesario, este hombre es un récordman local: ha llegado a once títulos con Colo Colo. Y, más encima, ha figurado en dos momentos épicos del club: fue parte del plantel que ganó la estrella número 30 y, también, del que ganó la estrella número 20. Sin querer, "Multicampeón", el único rubio espontáneo de la institución, se transformó en un especialista en múltiplos de 10. Pero es más que eso. Mena es el símbolo de la victoria.

-Sí, bueno- señaló con modestia- he tenido la suerte de estar en grandes planteles de Colo Colo.

-Es injusto que lo diga. Son muchos- y el crack se emociona.

El éxito siempre lo pilló sentado: el 17 de noviembre de 1996 ganó la copa número 20 sentado en la tribuna, junto a su padre (Luis no fue citado); dieciocho años después, el 20 de abril del 2014, ganó la copa número 30 sentado en la banca. Recuerda la estrella 20: "No jugué, pero traté de aportar al grupo. Fue maravilloso poder dar la vuelta olímpica con esos ídolos".

Mena, con 17 años, trotó al lado de Basay, del Coto Sierra, de Emerson y de Espina. Compartió con los ídolos en el camarín. Había ido a saludar, porque una de las virtudes históricas del "Multicampeón" ha sido la gentileza; luego se sumó a los gritos y perdió la compostura con champaña. "Me acuerdo y siento una nostalgia muy grande. Parece que fue ayer", ha dicho por estos días. El 2014 ocurrió a la inversa: en la victoria, fueron los jóvenes los que trotaron junto a él. Mena, sin jugar pero respaldado por su humanidad, es el ejemplo.

"Multicampeón" cree que todos los campeones son destacables y que todas las estrellas valen igual. No compara a los planteles, ni elogia a algún jugador. Como todo referente de verdad, a él solo le importa el pueblo: "En serio, más que cualquier otra cosa, lo que uno más quiere siempre es la alegría de la gente".

En la actualidad, dado que es suplente, utiliza el tiempo en dar consejos. Es usual que el "Multicampeón" muestre el camino a los jóvenes: "Les pido calma y tranquilidad. Y que disfruten". O, también, aconseja tener modestia y no negarse a los autógrafos. Incluso, como un perito en paciencia, aconseja no deprimirse en la banca. Mena, de hecho, ostenta otro récord: jamás ha reclamado por ser suplente.

-Lo que importa es que la gente esté feliz- reiteró.

Pocos podían aventurar que, finalmente, el máximo ganador en la historia del club más popular de Chile sea un rubio de ojos azules. Pero así es: "Multicampeón" ya estuvo en la estrella 20, ahora está en la 30. Juega poco, pero no importa. Ha quedado demostrado que, en este club, Luis Mena es inobjetablemente la reserva moral. J