En la recta final de la tramitación de la reforma educacional en el Congreso, la Presidenta Michelle Bachelet realizó un llamado a quienes obtuvieron los Premios Nacionales 2014 a colaborar, con sus conocimientos y experiencia, en el debate por la iniciativa, y destacó que muchos de los galardonados tuvieron la oportunidad de recibir una educación "gratuita y de calidad".

"Ustedes representan lo mejor del conocimiento de nuestra patria, tienen una experiencia privilegiada que puede y debe enriquecer los cambios que estamos impulsando en educación. Por eso, quiero convocarlos, junto a todos los Premios Nacionales de años anteriores, a que se hagan parte y contribuyan con sus ideas y experiencia a hacer de esta una mejor reforma", afirmó la mandataria en la ceremonia de entrega del reconocimiento, realizada en el Palacio de La Moneda.

En la ocasión fueron reconocidos Antonio Skármeta, en la categoría de Literatura; León Schidlowsky, en Artes Musicales; Sergio González, en Historia; Ligia Gargallo, en el apartado de Ciencias Naturales, y José Rodríguez, en Ciencias Tecnológicas y Aplicadas. El monto del premio es cercano a los 18 millones de pesos, además de una pensión vitalicia de 20 UTM mensuales (alrededor de 860 mil pesos).

ayuda

En tanto, Bachelet añadió que "el país necesita que ayuden a construir una mejor educación para todos los niños y jóvenes de Chile sin excepción, porque la sociedad ha entendido que la educación de calidad es un derecho social y que la educación pública debe recuperar el sitial que nunca debió perder".

"Usted decía, querido Premio Nacional de Historia (Sergio González), que la educación pública lo puso aquí, y la educación pública me puso aquí también a mí", añadió.

La secretaria de Estado también subrayó la necesidad de seguir con los esfuerzos para sacar adelante la reforma, lo que fue refrendado por el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, quien sostuvo que "paso a paso" el Ejecutivo seguirá avanzando en la aprobación de la iniciativa.

Por su parte, Sergio González, José Rodríguez y Antonio Skármeta, afirmaron que son "hijos de la educación pública" y que gracias a eso pudieron recibir el reconocimiento, apoyando la reforma impulsada por el Ejecutivo. J