cronica@estrellaconce.cl

Algunos piensan que es un amuleto común y corriente como cualquier otro. Que está de moda solo porque se lleva lo esotérico a la hora de elegir una joya. Pero no. Según especialistas en el tema, el orgón es un producto inhibidor de energías negativas que emanan de ciertos objetos que conviven día a día con el ser humano, como pueden ser los celulares, computadores, microondas o refrigeradores, cuyas radiaciones -aseguran- ocasionarían gran daño en las personas.

"Lo que hace es generar un cuerpo de limpieza en un radio de aproximadamente tres metros. Básicamente, su función es eliminar aquella energía muerta que generan las antenas", explica Alan Quiroz, quien se dedica a la venta y confección de orgones.

"Sirven para que el cuerpo se mantenga mucho más fuerte, y al estar más fuerte, obviamente estará más sano", agrega, a su vez, Margarita Sánchez, otra productora de este antiquísimo producto.

En términos generales, lo que señalan ambos terapeutas es que los orgones ejecutan una clase de barrera hacia la energía "sucia" que emana de los dispositivos tecnológicos que se utilizan a diario. "El orgón emite iones con cargas y crea un equilibrio con las energías contaminantes, que son iones sin cargas. No es que se los coma; por el contrario, se complementa de una manera en que ambos quedan con cargas positivas. Ellos van limpiando el ambiente de forma natural y normal, por lo que aleja la aparición de ciertas enfermedades", señala la profesional.

Pese a que las antenas instaladas en pleno corazón de las poblaciones son un problema actualmente, no son las únicas que generan este tipo de energías negativas. De acuerdo a lo que explican los expertos en el área, hasta los mismos electrodomésticos que se tienen en el hogar serían nocivos para la salud. "En una casa pequeña donde hay refrigerador, microondas, equipos y otros enseres también se está generando contaminación electromagnética", dice Sánchez.

"Si una persona se va a dormir y al lado, en su velador, pone su celular y al frente tiene la televisión, y al otro lado tiene un enchufado el wifi, no debe esperar descansar bien, ni tener un sueño reparador por el alto contenido de contaminación electromagnética que existe en su dormitorio. Por eso es necesario que las personas tomen conciencia y adquieran un orgón que los protegerá de estas ondas", subraya Alan Quiroz.

"La gente debe creer, porque es un producto que sí funciona. No es algo tan esotérico. Hay que sacarle esa estigma", añade el joven penquista.

¿de dónde vienen?

El origen de los orgones se remonta a los años '30. Su creador fue un psicoanalista europeo, Wilhelm Reich. "El orgón fue creado por un científico alemán. Lo que hizo él, en realidad, fue inventar algo para tratar naturalmente a sus pacientes y a su señora que tenían cáncer", explica Margarita Sánchez.

Tras varios meses de indagación creó este objeto con propiedades curativas. "Le dio el nombre de orgón, porque señaló que era el orgasmo de la naturaleza (...). Es que es un objeto creado con especies naturales únicas. Tiene cuarzo, metales nobles, es decir, metales que salen de la tierra, que no son creados. Todo aquello hay que ponerlos sobre alineaciones correctas. La cantidad de cada producto también debe ser la adecuada. Todo aquello debe estar bañado en resina no tóxica", detalla.

Según los especialistas, fue a mediados del 2000 cuando se retomó todo lo referente al tema de los orgones. "Fue en ese período cuando comenzaron a aparecer registros de los trabajos del doctor Reich. Otros científicos tomaron sus apuntes para continuar con su investigación y generar un argumento científico sobre este producto", agrega Sánchez.

Piratería

La moda de las joyas "esotéricas", se ha ampliado enormemente durante los últimos años. En este sentido, el mercado se ha puesto competitivo y también fraudulento a la hora de vender los productos, según comenta Quiroz.

"Hay mucha gente que está haciendo orgones sin ninguna propiedad. Se ha ido perdiendo un poco el concepto. Hay mucho que aprender y leer, hay que informarse un poco sobre el tema. No es llegar y hacer uno y decirle a las personas cosas superficiales como que se van a mantener alejadas de los males, entre otras cosas", añade.

Por lo mismo, ambos recomiendan a las personas que prueben el producto antes de comprar mediante un simple ejercicio. "Puntualmente, nosotros probamos todo lo que creamos. Lo tanteamos con radiestesia y también de una forma física con las mismas personas para que la gente confíe y se dé cuenta de que el producto sirve", comenta Sánchez.

Esto es muy importante, debido a que, aseguran, puede ser muy perjudicial para la salud. "Hay metales como el acero quirúrgico que son pésimos para la piel. Me he topado con clientes que llegan con orgones de mala calidad y que les han traído puras malas energías a su vida", relata la terapeuta.

Actualmente en el mercado se pueden encontrar diversos orgones y a precios que dependerán de su tamaño. "Pueden ser colgantes, aros, anillos y pulseras, si es que se quieren llevar a diario. También existen otros para el ambiente como en cúpulas, platos y en limpia papeles. Su costo es de acuerdo a su tamaño. Es que son complicados de realizar. Es un trabajo muy minucioso", recalca Margarita Sánchez. J