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Una bienvenida con todo el color de Chiloé

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nelson.soto@laestrellachiloe.cl

Para ofrecerles una bienvenida con lo más gramado de la artesanía insular, decenas de creadores locales se instalaron en el sector Pudeto Bajo, en la entrada de la ciudad de Ancud, con una feria que construyeron con improvisados módulos de tableros de OSB, latones y listones de madera. Había que estar listos cuanto antes para recibir a los visitantes.

La disposición de estos puestos fue pedida en su oportunidad por varias organizaciones del sector. Fue así, que a través de un proyecto que diseñó la Municipalidad de Ancud se creó este lugar, el que cuenta con características especiales para darle vida al sector.

Esta es una zona estratégica, ya que es la entrada y salida de la provincia para turistas y los isleños, lo que generó que este grupo de vecinos viera una gran posibilidad de conseguir un recurso extra para el sustento familiar.

Durante enero pasó por este recinto alternativo gran cantidad de extranjeros, proveniente de lugares como Alaska, Brasil, España, Argentina, sumándose veraneantes de varias partes de nuestro país, quienes se dieron el tiempo para observar y adquirir algún producto, antes de seguir con su rumbo.

Patricio Godoy, de la comunidad indígena Newen Mapu del sector Pudeto Bajo, comentó que tienen tejido chilote, hierbas medicinales y artesanía en general.

El poblador reconoce que con el recambio de turistas, más el buen tiempo, hay mejores ventas.

"Tenemos nuestros productos que son todos reciclados y todo hechos por los artesanos de la comunidad para vender. Hay mucha artesanía en madera de ciprés, peinetas, palillo y aceite esenciales. También hay artesanía en cestería, telar de lana y aros de alerce, entre otras cosas", apuntó.

Sumó el artesano que tienen precios para todos los gustos. Desde 500 pesos se puede llevar un llavero de ciprés con una incrustación de piedra, hasta un trabajo en tallado por 60 mil pesos.

"A los turistas le gustan mucho la artesanía que hacemos nosotros, ya que es bastante rústica y tenemos para todos los gustos", mencionó.

EXPECTATIVAS

Godoy comentó que la comunidad indígena no tenía muchas expectativas con la instalación de estos módulos en este populoso sector, pero que les ha resultado bastante positivo en términos de venta.

"Vamos a luchar este otro año para que en vez de este módulo tengamos una ruca de la comunidad. Sería interesante para la gente esperarlos con tortillas de rescoldo, con mate, para que vean cómo es una ruca típica de la Isla", recalcó.

Newen Mapu pretende trabajar también en temporada baja y esperan que los turistas de la tercera edad sean sus principales consumidores.

"Esperemos que funcione, va a depender mucho del apoyo de la municipalidad. En la comunidad nuestra somos 15 familias y todos tienen un espacio para poner sus productos", dijo el vecino.

Un par de metros más allá, está el módulo de la agrupación de artesanas "La glorieta", compuesta por 12 integrantes, quienes sacan cuentas alegres un mes antes que termine la temporada estival.

"Nos ha ido muy bien, ha llegado bastante público y le hemos vendido todo tipo de artesanía. También le ofrecemos gorros, bufandas, cuellos, mermeladas, productos naturales de plantas medicinales, hay de todo lo que es de Chiloé", indicó Inés Caileo, integrante de esta organización.

Añadió la artesana que la idea es mantenerse en el lugar durante todo el año y atender al visitante que llegue a la provincia en la temporada de invierno.

"Debemos agradecer a Dios porque nos da la oportunidad de trabajar todos los días", confesó.

En los últimos días el flujo de turistas se ha incrementado notablemente, por ello los artesanos de Pudeto Bajo comienzan su labor desde las 9 de la mañana y hasta las 21 horas sin descansar, con el único objetivo de atender al que visita la zona.

permanencia

Así lo relató Miriam Vargas, quien agregó que el trabajo va mas allá de vender un producto, lo que buscan en realidad es que la gente que viene de afuera se quede en la ciudad de Ancud.

"En enero y febrero ha sido muy abundante la llegada de turistas. La idea es retenerlos que conozcan las maravillas de Ancud y después puedan seguir conociendo el resto de la Isla. Le ofrecemos todo lo que hacemos con nuestras manos como la lana, trabajo en madera, acá nada es revendido", sentenció.

La ancuditana valoró la concreción de este proyecto en la entrada de la ciudad del Pudeto, indicando que tendrán un buen futuro, aunque reconoce que falta por arreglar algunas cosas en la infraestructura.

"Todavía tenemos muchos detalles por construir, pero avizoro un buen futuro porque es una manera que el turista pare aquí y podamos hacerle turismo a la ciudad, para que no se vayan directamente a Castro. Creo que es esa la importancia que tienen estos módulos", puntualizó.

Quien está complacido de trabajar al aire libre mostrando a los visitantes el tallado que hacen sus manos, es el artesano Juan Carlos Duarte.

El artesano enfatizó que su labor es la de exponer los diferentes trabajos que desarrolla en madera y ofrecerlas. Vende cucharitas para el pebre, merkén o la sal que van desde los mil pesos, hasta cucharones que llegan a los $8 mil.

"Hago fundamentalmente cucharas ancestrales chilotas y tengo agujas para lanas. Especialmente trabajo en madera chilota hecha a mano. Aquí empecé hace poco, pero en general me agrada lo que hago y he tenido ventas en este verano que me dejan conforme", manifestó.

DIFUSIÓN

Duarte expresó que se hace necesario un poco más de publicidad de la feria, así como ordenar los estacionamientos, porque muchos visitantes no ingresan al lugar por falta de un punto donde dejar el vehículo.

"El estacionamiento es para la feria y la municipalidad tendrá que arreglar eso. En todo caso invitamos a los turistas porque aquí está lo mejor de la artesanía chilota. Entrando a la Isla ya tenemos una gran cantidad de productos para ofrecer", acotó.

Finalmente, la agrupación "Pudeto Bajo" invitó a los veraneantes a pasar por los módulos y puedan adquirir algún producto.

"Hay gorros, llaveritos, mantas, 'pingüinos', chombas, chalecos de niñitas y todo está a bajo precio. Como todas las cosas tenemos días buenos y malos", resaltó Doris Villegas, esperando que el resto de este mes los viajeros no dejan de pasar por esta feria. J