l Pedro Bárcena González
Con la información científica reunida y los antecedentes proporcionados por cámaras de vigilancia fue posible dar con el paradero del responsable de dos atracos a un céntrico local comercial de Castro. El imputado, quien reconoció su participación en los delitos, ayer quedó en prisión preventiva.
Las pesquisas fueron realizadas por personal de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) de la capital chilota, que analizó la tienda emplazada en calle Blanco tras los ataques perpetrados el 2 y 9 de abril, que generaron pérdidas millonarias.
rostro
Tal como expresó el subcomisario Bernardo González, las imágenes entregadas por el sistema de seguridad "permitieron detectar el rostro del responsable, cuyas características sirvieron para realizar controles de identidad en varios puntos de la ciudad".
Gracias a este despliegue, en calle Serrano se logró dar con la ubicación de un sujeto que reunía los rasgos. Al no tener identificación fue derivado al cuartel policial, donde se le tomó declaración, reconociendo su intervención en ambos ilícitos.
El joven de iniciales J.A.M.R. (30) tenía una orden de aprehensión pendiente por el delito de daños, ingresando a cumplir el requerimiento a la cárcel hasta que durante la jornada de este jueves fue encausado por los delitos de robo en lugar no habitado.
A la evidencia gráfica presentada en la audiencia se sumó un informe policial por las huellas levantadas en el local comercial. "Estas prueba fue analizadas en el Laboratorio de Criminalística, correspondiendo al imputado", acotó González.
Con estos antecedentes no solo se formalizó la investigación, sino también el organismo persecutor solicitó la prisión preventiva para el joven, cautelar que fue acogida por el tribunal.
"Se argumentó que al tener antecedentes penales anteriores, el imputado no tendría beneficios ante una eventual condena", manifestó el fiscal Javier Calisto, quien sustancia la causa, añadiendo que se decretaron 60 días para el desarrollo de las pesquisas indagatorias. J
l El fiscal Javier Calisto destacó la labor policial realizada, "ya que se logró resolver un caso sin que existiese flagrancia. El trabajo científico se complementó con el análisis de los videos, una serie de pruebas que permitieron imputar responsabilidad a la persona". Agregó que se instruyeron otras diligencias que estarán a cargo de la Bicrim.