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Pagani no duda en afirmar: "¡El fútbol argentino murió!"

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Horacio Pagani, mito del periodismo sudamericano, anuncia, desde la sala de redacción del diario Clarín, que el fútbol argentino está oficialmente fallecido. Pereció, explica, el jueves 14 de mayo a las 22.05 horas en La Bombonera, luego de sobrevivir a una agonía que duró años. El culpable del golpe letal, dice, fue un grupo de barristas de Boca que lanzó gas pimienta a los jugadores de River.

Y hoy, después de la tragedia, dice Pagani, el pueblo argentino, y especialmente él, está de luto.

Pagani, un señor de 71 años, dueño del temperamento más explosivo de su país, habla con un tono levemente fúnebre. Relata que cuando vio el incidente sufrió una crisis nerviosa. Que ni siquiera él, que lleva 47 años cubriendo fútbol, se imaginó un desenlace así. Eso, aunque dos días antes de la tragedia el señor Pagani, confiesa casi susurrando, tuvo una revelación: "Yo le di aviso a mis compañeros que este partido tenía posibilidades de no terminar".

-Sospechaba que una expulsión de un jugador de Boca o un gol de River iba a generar una reacción tan grande de los hinchas de Boca… Era un presentimiento. ¿Pero esto?

-Mirá… con Riquelme, lo que hicieron los jugadores de Boca el otro día no hubiera pasado. Él es un defensor de la profesión, hubiera solidarizado con los jugadores de River.

-Que los máximos representantes del país, que son Boca y River, jueguen como juegan, es una demostración de que se puede anunciar la muerte del fútbol, del juego. Y lo que pasó en La Bombonera es la muerte del espectáculo, o sea la muerte definitiva.

-Estoy preocupado porque es la actividad que más me gusta, la que sigo hace tanto tiempo.

barbaridad

El nivel del fútbol argentino, reconoce Pagani, está a años luz del de hace una década. Hoy los resultados mandan ("se busca ganar a cualquier precio") y añade, también, que el aumento a 30 equipos en Primera División es una de las razones de la debacle: "¡Una barbaridad! ¡Una cosa inentendible!".

Además, dice Pagani, aparecen las barras. Si el juego, repite, estaba muerto, hoy murió el entorno. Los barristas se apoderaron del fútbol y, de paso, los políticos les ofrecen protección. Es un círculo vicioso, desliza.

-Yyy sí, esto no parece que vaya a cambiar. Pero el fútbol va a seguir, y como lo que manda es el amor a la camiseta, las barras van a seguir haciendo negocio. Entonces…

Da la sensación de que Pagani va a revelar algo. Escuchamos expectantes. Hable, Pagani, dígalo, pensamos. Pero la leyenda calla. Deja la idea en el aire y explica: "¿Sabés? Estoy más grande, ya tengo 47 años acá en Clarín… no me caliento tanto la cabeza".

-Naaah, fue una formalidad, nada más. En realidad sigo igual que siempre, no voy a dejar de pelear nunca, ¡jajajá! J