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Acusados de crimen de pescador aseguran que fueron "emboscados"

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pedro.barcena@laestrellachiloe.cl

Convencidos en su verdad se encuentran los dos acusados del asesinato de un pescador en Ancud, la primera víctima en la Isla de la denominada "Guerra del loco". Los sujetos arriesgan pena de crimen, pero esperan salir absueltos de lo que califican fue un ataque en su contra que derivó en este fatal caso.

Los tripulantes de la lancha Smach III que se vio envuelta la madrugada del 14 de marzo del 2013 en un confuso incidente en el sector Chepu-Ahuenco de la comuna de Ancud, en el cual falleció Luis Alberto Vergara Ampuero (45), enfrentan un juicio oral que ayer tuvo su segunda jornada. Una instancia en que la presentación de prueba testimonial y pericial se extendió para buscar acreditar las posturas de los intervinientes.

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Los acusados de iniciales J.B.V.R. (58) y J.P.A.G. (48) se constituyeron en la primera evidencia en esta audiencia, al entregar su declaración en estrado. Pese a sus limitaciones culturales -ambos son analfabetos- y una breve consulta con su defensor Luis Mora, entregaron detalles del enfrentamiento vivido en el mar insular.

El mayor de los imputados, quien era el capitán de la nave destinada a realizar guardia en el área de manejo asignada al Sindicato de Pescadores de Chepu, indicó que zarparon alrededor de las 3 de la madrugada para realizar su ronda de vigilancia de rutina cuando se vieron envueltos en este altercado.

"Salimos hacia Punta Mala en una noche muy oscura y encontramos a cinco embarcaciones que nos alumbraron con sus focos y nos hicieron una emboscada. Nos dispararon por lo que tuvimos que arrancar hasta que llegamos a la zona de la desembocadura del río Chepu", aclaró el pescador.

El vigilante que por más de 11 años ha realizado esta función recalcó que la víctima recibió un balazo por el "fuego cruzado" que se registró. Una postura que el fiscal de la causa Jorge Raddatz rechaza, centrando la acción dolosa en los guardias que enfrentan a la justicia.

Justamente, el persecutor apuntó a demostrar tras el testimonio del avezado hombre de mar que la visibilidad no era tan limitada como lo señaló y que no emplearon sus equipos de radio de forma oportuna ante la supuesta "emboscada" que les realizaron. Tampoco huyeron antes al verse en inferioridad numérica.

Por su parte, el acusado de percutar el disparo que le costó la vida al ancuditano entregó una declaración similar a la de su compañero. Enfatizó que "vimos un bulto en el mar y luego nos encandilaron y nos rodearon... nos atacaron por todos los lados, disparando, así que nos tiramos al suelo mientras arrancábamos a mar abierto".

El pescador aseguró que nunca ha manejado un arma y que desconoce su operación, lo que fue rebatido por el abogado querellante, Tulio Arismendi, quien apuntó que el imputado pudo identificar el sonido de los disparos en su primera declaración ante la policía civil. J