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Luego que hace una semana fueran capturados dos sujetos supuestamente involucrados en el homicidio del taxista quellonino Juan Fernando Rivera Oteiza (55), ocurrido a fines de marzo del 2014, la familia de la víctima lamentó la lentitud del proceso investigativo, por el que incluso estuvo detenido un sujeto que aparentemente no tendría que ver con el crimen, un buzo que aún está formalizado y con cautelares.

La hermana del transportista, Elena Rivera, señaló que "queremos pedir disculpas al inculpado, que mi hermano, por ser muy parecido a quien lo asaltó y por el estado en que él estaba, lo confundió", advirtiendo que "yo sé que por esto, para la familia del inculpado, ha sido una larga agonía, tal como la nuestra".

Lo anterior lo manifestó la familiar de Rivera Oteiza, luego que recientemente personal de la Brigada de Homicidios de la PDI de Santiago viajó hasta Quellón y detuvo a los dos presuntos autores materiales del asalto que afectó a su hermano el pasado 28 de marzo del año pasado, ataque que le dejaron graves lesiones que le causaron finalmente el deceso.

"Ahora esperamos justicia, porque se sabe que ellos sí fueron", recalcó Elena Rivera, reclamando que "estas personas están ahora bajo investigación, tal como lo estuvo el imputado anterior: o sea, vamos a empezar con lo mismo. Nosotros queremos mayor rapidez, porque tenemos totalmente claro que ellos fueron", apuntó.

otros golpes

La fuente recordó que la muerte del taxista representó para su familia un dolor muy grande, ya que era el único varón entre los 5 hermanos y, además, pocos meses atrás había ocurrido otra desgracia en el grupo familiar de la víctima.

"Ellos han sufrido mucho, porque solo hacía un par de años habían perdido a su mamá producto de una enfermedad y en el año 2013 se había suicidado el hermano mayor, que era hijo de la señora de mi hermano", detalló la fuente.

El crimen de Rivera Oteiza ocurrió a la altura del pasaje Las Dichas, donde el taxista fue abordado por tres sujetos jóvenes, para ser atacado con golpes de puño y lesionado con un arma blanca a la altura del cuello, para luego sustraerle una billetera con 50 mil pesos.

La víctima llegó por sus propios medios al Hospital de Quellón, donde luego de estabilizarlo lo trasladaron hasta el Augusto Riffart de Castro, en que le realizaron 6 intervenciones quirúrgicas, antes de ser transportado al Hospital Base de Puerto Montt, donde fue operado igual cantidad de veces, falleciendo el día 6 de mayo, luego de más de un mes de agonía.

Una información anónima involucró en el hecho a un joven quellonino que luego del reconocimiento por parte del taxista aún vivo a través de un set fotográfico, fue imputado por el delito de robo con homicidio y dejado en detención preventiva, pese a que la defensa insistió en que el sospechoso al momento del asalto estaba embarcado en una lancha, trabajando en la extracción de luga.

A poco andar de la investigación, esta comienza a seguir una línea alternativa en la que se inculpaba a otros tres sujetos que empiezan a ser indagados, de los cuales la Fiscalía solicito la detención, formalizando a dos de ellos (uno menor de edad), ya que el otro se había quitado la vida meses atrás.

El Juzgado de Garantía de Quellón determinó 90 días para la investigación, a lo que la hermana de la víctima fatal alegó: "¡Qué van a averiguar ahora! Que son unos desgraciados que por 50 mil pesos le quitaron la vida y rompieron una familia, y de paso le hicieron daño a otra".

Actualmente el primer imputado está en libertad, tras cerca de ocho meses de prisión preventiva en cárceles de Castro y Puerto Montt, tiempo en el que incluso se cosió los labios e hizo huelga de hambre. Está con medida cautelar de firma periódica en Carabineros de Quellón. J