Aguardan por respuestas concretas
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En alza se encuentra la preocupación y alerta de los vecinos de la calle Prolongación Doctor González Canessa en Ancud, donde actualmente residen nueve familias, como consecuencia de las pésimas condiciones en las que se encuentra esa arteria y el desinterés de las autoridades municipales por dar una solución al problema.
Mientras el invierno se encarga de hacer aún más notorio el mal estado del camino, debido a la acción de la lluvia, el barro y la acumulación de escombros, dificultando el acceso tanto de vehículos como de los propios peatones, las estaciones más secas del año generan un levantamiento de polvo que afecta el diario vivir de los pobladores, principalmente de los niños.
No obstante, la problemática principal radica en que esta calle se encuentra en una cuesta y solo pueden acceder vehículos con tracción, algo que evidentemente podría transformarse en algo peor si llegase a ocurrir una emergencia que requiera el tránsito de una ambulancia o un carro de Bomberos.
Son más de tres décadas las que los residentes de este periférico sector ancuditano llevan esperando por alguna respuesta a sus demandas. Y no un simple, "ya veremos" o esporádicos "tapados" con ripio. Aguardan por soluciones concretas que los dejen más tranquilos.
Hace poco más de dos meses sostuvieron una reunión con algunas autoridades locales, en las que se estableció la oportunidad de asistir al concejo municipal a exponer el problema. Sin embargo, esto no trajo alcances favorables.
promesas
Uno de los voceros de los vecinos, Juan Oyarzo, manifestó que "no ha pasado nada en el último tiempo, nada, nada, está el camino tal cual como está siempre, siempre dicen que vendrán esta semana, que mañana, que el martes, que el miércoles, y hasta ahora no ha pasado nada".
Sumó que "tenemos este camino malo que es pura laja, nosotros sufrimos acá arriba porque cuando vamos a comprar nuestras cosas con vehículos chicos o colectivos, no suben, de ahí tenemos que hombrear nuestras cosas para subirlas".
Uno de los anhelos es sin duda poder optar a una pavimentación u otro procedimiento que pudiera subsanar en algo los problemas.
Así lo destacó el dirigente, añadiendo que "nos gustaría que se pueda hacer una avenida pavimentada como en otros lados... por el sector de Pauldeo da gusto ir por esas cuestas, todo pavimentado. Esto es una calle, ya estamos en el centro".
Además de la despreocupación que los pobladores acusan de parte de las autoridades de turno, los dardos también apuntan a la figura de un conocido empresario ancuditano, quien se habría adueñado de esta calle, sin el consentimiento de los residentes.
Esto fue recalcado por Pedro Galindo, quien durante toda su vida ha estado en este lugar, detallando que esta persona "se hizo dueño del camino, buscó las máquinas del municipio, cerró hasta el sector de Caracoles".
Agregó el isleño que "este camino que aquí tiene fue del finado Augusto Kaaman, después lo tuvo Aniceto Ampuero, después lo tuvo él". Finalmente dijo que "no hemos recibido ayuda de nadie, a veces viene la municipalidad, pero nos dejó presos porque esto parece un camino vecinal ahora, no es un camino público".
Por su parte, Héctor Galindo, quien llegó a vivir hace sólo un par de años, ya ha debido sufrir en carne propia los problemas antes mencionados. "La dificultad es cuando llueve, salta todo, se sale del camino, ahora ya no queda nada de ripio, lo llevó todo el agua y se junta allá abajo en lo plano", argumentó.
En tanto, María Herrera, quien tiene su domicilio a la entrada de Fátima, indicó que "uno que trabaja como transportista, se da cuenta de lo que aquí pasa, es muy complicado, no se puede acceder al lugar y pensado que cerca hay un colegio, es un tema más delicado". J
"No hemos recibido ayuda de nadie, a veces viene la municipalidad a arreglar de vez en cuando el camino, pero nos dejó presos porque esto parece igual que un camino vecinal, es un camino vecinal el que hay ahora, no es un camino público", manifestó el poblador de toda una vida del sector.
"No puede ser que en Ancud dejen postergadas a estas personas que viven ahí, algunas personas llevan más de 30 o 40 años con la esperanza de ver su calle pavimentada, o al menos arreglada, en mejores condiciones que las que se ve ahora", expresó la mujer que tiene su casa en el sector.
"En el verano también tenemos problemas porque con el polvo y las piedras, los vehículos no pueden subir porque las piedras quedan sueltas, no hemos tenido soluciones de nadie, no hay nadie que nos pueda solucionar el problema", aseveró el jefe de hogar que espera respuestas.
"Desde la municipalidad dijeron que esta próxima semana venían, vamos a ver, yo conversé con la persona que está encargada de la maquinaría, él es el que me dice que pasado mañana, esperaremos hasta la próxima semana o sino quedaremos hasta ahí no más, porque ya no tenemos dónde más reclamar", dijo.