Durante diez días, científicos de la University of North Texas (UNT), la Universidad de Magallanes y el Instituto de Ecología y Biodiversidad de la U. de Chile realizaron mediciones en distintos flujos de agua en sitios cercanos a Puerto Williams, llegando a la conclusión de que esa zona tiene "las aguas más puras del planeta", según informó la casa de estudios de Punta Arenas.
"Nuestros resultados confirman que estas aguas son limpias, de las más limpias que se registran en el planeta. De hecho, los instrumentos que utilizamos para estudiar los muestreos detectan hasta dos partes por millón de químicos en el agua, y aquí no detectaron nada", indicó Guido Verbeck, investigador principal del proyecto y director del Laboratorio de Imagen de Espectrometría de Masas de la UNT y profesor asociado de la Universidad de Magallanes.
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El trabajo incluyó mediciones en los ríos Ukika, Bronces y Róbalo, y la laguna de los Guanacos y otras fuentes de agua dulce en la zona. Si bien los resultados serán publicados próximamente, fueron adelantados en la Universidad de Magallanes esta semana.
Desde ese plantel se indicó que la zona austral del país es "la única región del mundo donde puede haber una línea de base con cero contaminación en las aguas, la que puede utilizarse para ver lo que ocurre en el Hemisferio Norte y otras partes del mundo", según el científico.
De acuerdo al doctor Ricardo Rozzi, director del programa de Conservación Biocultural Antártico de la U. de Magallanes, esto deja a "la Reserva de la Biósfera Cabo de Hornos como un laboratorio natural, para lo que el doctor Verbeck llamó una línea de base preindustrial, que existe en lugares del mundo únicos como este, es decir, que todavía no han sido afectados por el desarrollo industrial". J
En otra investigación, un grupo de científicos integrados en la Expedición Antártica Chilena estudian estos días las posibilidades de un eventual colapso en la plataforma colindante con el glaciar Unión, un paraje extremo situado a mil kilómetros del Polo Sur.
"El glaciar Unión está en un punto colindante con la mayor plataforma marina de hielo de la Antártica. Si esta plataforma llegara a colapsar, esto tendría consecuencias climatológicas a nivel global", explicó el glaciólogo Francisco Fernandoy.