Video fue clave para acreditar violento asalto

El valor de la tecnología que aportan los smartphone pocas veces ha quedado mejor graficado en el plano judicial que en lo sucedido en los últimos días, con los antecedentes que aportaron las imágenes de video que tomó el testigo de un feroz asalto en pleno centro de Castro. La evidencia fue clave para acreditar la participación de los dos acusados, quienes recibieron penal de crimen.

Los sujetos de iniciales C.P.C.R. y M.A.C.V. fueron condenados en el juicio realizado en el Tribunal Oral en lo Penal castreño por el delito de robo con violencia, perpetrado contra un joven en calle Blanco, a menos de dos cuadras de la Plaza de Armas local.

En medio de una ingesta de alcohol, los delincuentes atacaron a la víctima, sustrayéndole un bolso, pero antes le propinaron una golpiza con la intención de reducirlo.

Quántum

Así fue confirmado por el fiscal de la causa, Javier Calisto, quien invocó inicialmente 12 años de presidio contra los imputados, quienes se encuentran privados de libertad en la cárcel de Castro. Para sustentar este quántum incorporó la agravante de pluralidad de malhechores. Sin embargo, los sentenciadores desecharon esta modificatoria de responsabilidad, ante lo cual el persecutor debió bajar su pretensión de sentencia.

En definitiva, los sujetos fueron condenados a 5 años y un día de reclusión efectiva.

"La prueba entregada permitió acreditar la existencia del delito y la participación de estas personas. Importante fue la intervención de los carabineros que lograron la rápida detención de los acusados y el trabajo de la SIP (Sección de Investigaciones Policiales) que analizó los antecedentes del caso", argumentó el abogado.

No obstante, sus fichas las puso en una evidencia visual. "En el juicio se incluyó y fue preponderante un video grabado en el cual se ve el accionar de los imputados. Además, este testigo declaró en la audiencia", indicó Calisto.

La defensa representada por el abogado Juan Luis Castro había solicitado la absolución de los jóvenes, pero los jueces desestimaron sus datos probatorios, acogiendo la evidencia acusatoria.