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Iglesia Católica insiste en que la crisis de la pesca no ha finalizado

Los artesanales esperan que San Pedro les ayude para superar su complicada situación. El Obispado de Ancud hace un fuerte llamado a proteger el Archipiélago de la contaminación.
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Nelson Soto Asencio

A más de un mes de la gran movilización de los pescadores por la crisis de la marea roja que afectó a la Región de Los Lagos, las cosas para los hombres de mar en la provincia de Chiloé no han mejorado mucho y en especial Ancud, donde según los registros pesqueros artesanales hay cerca de 4.500 trabajadores inscritos, incluyendo buzos, ayudante de buzos y recolectores de orilla.

Si bien un número cercano a las 1.200 artesanales ya recibieron el bono de 300 mil pesos que les entregó el Gobierno en una cuenta RUT, otros 1.300 debieron inscribirse en proyectos de proempleo para que obtener el beneficio del Ejecutivo.

A esta situación se le debe sumar la cesantía de más de 300 trabajadores de las salmoneras que se alimentan periódicamente en una olla común en Ancud y otros cientos en una similar en la comuna de Quellón.

Procesión

Quizás el desempleo y los efectos de marea roja fueron los factores que influyeron para que no hubiera una gran efervescencia de fieles en la celebración de San Pedro este 29 de junio pasado en la comuna del Pudeto. Al decir de muchos ellos, "la estamos pasando mal y hay poca ayuda para nosotros".

Cerca de 250 pescadores pertenecientes a las caletas Fátima y del muelle de esta ciudad celebraron a su patrono con una misa en la Catedral de Ancud oficiada por monseñor Juan María Agurto, obispo de la Diócesis San Carlos. Luego y como es habitual, comenzaron su procesión por las calles de la ciudad para dirigirse hacia al muelle principal y proceder a embarcar las imágenes y realizar el tradicional paseo por la bahía acompañado por cerca de 10 navíos.

Si bien la fe de los artesanales se mantiene viva, ellos llevan su dolor por dentro. Saben que el mar está contaminado y que muchas familias aún siguen sufriendo por no poder trabajar, a pesar de que ya se abrió una buena parte de sectores en Chiloé para extraer productos del mar.

Medio Ambiente

En este sentido, el obispo Agurto recalcó que esta es una fiesta que se desarrolla con fuerza en toda la zona en torno a Pedro y Pablo, pero que esta vez fue un poco distinta.

"Este fue un año especial de celebración por todo lo que está pasando en la región por la crisis social y ambiental. Los pecadores han recordado la fecha de San Pedro y los hemos invitado a valorar por compartir solidariamente las dificultades y también por trabajar unidos por lo que se viene más adelante. Tenemos que cuidar la fuente de trabajo y tenemos que asegurar la subsistencia no solo de la familia, sino de los hijos y las nuevas generaciones con respecto de los recursos del mar", dijo el prelado.

La autoridad religiosa mencionó que con la crisis de la marea roja y la contaminación del mar se está haciendo el llamado a tomar conciencia del cuidado que se debe tener del medio ambiente, "porque en definitiva el daño lo estamos haciendo a nosotros mismos. El Papa Francisco nos ha invitado en una carta pastoral a preocuparnos del cuidado natural del planeta y hacer acciones cada uno en lo personal y familiar, no solo esperando leyes que tienen que venir de nuestros legisladores, sino que procurando mantener limpio nuestro mar, nuestra tierra y utilizando adecuadamente los recursos que tenemos", pidió.

Sumó la misma fuente que los trabajadores del mar están expectante de cómo se va resolviendo esta crisis. Y volvió a reiterar que la gente cesante de las salmoneras y de las empresas mitilicultoras se sigue manifestando en las comunas chilotas.

"Frente a la Municipalidad de Quellón y en la Glorieta de Ancud hay gente que se está manifestando y que son modos de hacernos presente a todos como sociedad, para ver cómo podemos ayudar", acotó el sacerdote.

Voces

Para la mayoría de los pescadores la crisis de la marea roja no ha pasado y los efectos tan dañinos aún se mantienen. Si bien la fe les permite tener esperanza, piden que esta situación termine más temprano que tarde.

El presidente del Sindicato del Muelle de Ancud, Fernando Almonacid, sostuvo que la celebración de este miércoles fue muy diferente a las anteriores.

"Lo tratamos de hacer como todos los años, pero estamos tratando que esta situación de la marea roja se solucione. Además, esperando que se concrete las soluciones que se dijeron en la mesa. En esta procesión anduvimos unas 250 personas y esperamos que San Pedro limpie las aguas y nos ayude para mejorar este problema. Lo bueno es que el día nos acompañó y pudimos hacer la procesión", añadió el dirigente.

En tanto, la agrupación folclórica Raíces Chilota acompañó a los artesanales con varias tonadas para alegrar la procesión. César Yáñez, integrante del grupo, se mostró alegre con que se realicen este tipo de actividades a pesar de la realidad que se vive.

"Esta es una tradición chilota y acá estamos para colaborar y sentirnos orgulloso de nuestra Isla de Chiloé. Hubo marea roja y gracias a Dios estamos saliendo y ojalá todo se solucione por el bien de los pescadores y por toda la comuna de Ancud", sentenció.

Acompañando a los hombres de mar estuvieron autoridades locales y dirigentes sociales, quienes hicieron el llamado al Gobierno a seguir apoyando y concretando iniciativas para mejorar el actual panorama socioeconómico.

La presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos Urbanas de Ancud, Adriana Gallardo, catalogó que "no se pierde la esperanza que el día de mañana se vuelva a retomar la pureza del mar, que sabemos es parte de un vertimiento y un veneno que tiraron al mar producto de los salmones".

Agregó que los vecinos y pescadores deben seguir unidos: "Las plegarias son de unidad y seguir trabajando para los hermanos y hermanas que laboran en el mar, porque con unidad se consiguen las cosas".

El artesanal Claudio Alvarado confesó que "harto hemos sufrido los pescadores artesanales y esperamos que desde ahora todo se mejore".

Misma opinión tiene Juan Vargas, otro hombre de mar, quien tiene la esperanza que la merma pesquera termine. El isleño participa todos los años de la procesión al primer Papa de la Iglesia.

"Esperamos que todo se solucione pronto y le estamos rogando a Dios porque queremos que vuelva a quedar normal todo, como era antes. Nuestro patrono San Pedro nos dio lindo día. Un saludo para todos mis amigos pescadores", concluyó el isleño.

"Fue un año especial de celebración por la crisis social".

Juan María Agurto,, obispo de Ancud.

"Le estamos rogando a Dios para que vuelva a quedar todo normal, como era antes".

Juan Vargas,

pescador.