Cuatro atracos contra la propiedad pública y privada y que han quedado al descubierto en un período inferior a las seis horas investigan detectives de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) de Castro.
Al robo con intimidación cometido en un local de la galería Insular (ver página 6) se sumaron otros ilícitos en que antisociales se apoderaron de diferentes especies, entre joyas, computadores y equipos electrónicos domésticos. Las pérdidas totales son cercanas a $7 millones.
El informe de la PDI señaló que uno de los primeros delitos quedó al descubierto la tarde del martes en una vivienda en Cancha Rayada, Castro Alto, donde los ladrones tras ingresar por una de las puertas se apoderaron de distintos artículos.
Néstor Arias, subprefecto de la Policía de Investigaciones, manifestó que los sujetos una vez en el interior del inmueble "sustrajeron un televisor marca Samsung, un notebook marca Lenovo, una bicicleta marca Oxford y un cilindro de gas, todo avaluado en 700 mil pesos".
El detective expresó que la misma tarde el equipo indagador atendió otra diligencia en una vivienda ubicada en el sector de Llicaldad, donde los sujetos aprovechando la ausencia de los moradores ingresaron para apoderarse de diferentes especies en joyas.
Detalló el policía que en este caso los individuos "sustrajeron cinco relojes dorados, una consola Play Station y una cantidad indeterminada de joyas entre aros, pulseras de oro, plata y fantasía". La víctima avaluó las pérdidas en una suma cercana a los 4 millones de pesos.
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La agenda de la Bicrim, siempre al final del mismo día, dejó al descubierto otro robo en lugar no habitado, esta vez en un inmueble de la villa Bordemar en la Ruta 5 Sur, donde los hábiles ladrones sin la necesidad de forzar la cerradura de la puerta accedieron para apropiarse de medio millón de dinero en efectivo y una cámara de video marca Sony.
Esta verdadera ola de atracos afectó de igual manera a las dependencias de la Escuela Luis Uribe Díaz, hasta donde llegaron desconocidos para superar las medidas de seguridad del establecimiento municipalizado y adueñarse de tres computadores avaluados en 700 mil pesos.
Las pesquisas fueron instruidas por el Ministerio Público castreño.
Luis Contreras Villarroel luis.contreras@laestrellachiloe.cl