Sacerdote hace urgente llamado para ayudar a vecino postrado
Habitante de Molulco que sufrió un accidente vascular en mayo de este año está postrado y, a pesar de residir con su madre, quien es alcohólica, no recibe la atención que requiere, viviendo en la inmundicia y la falta de alimentación.
La cruda e inhumana realidad en que se encuentra un vecino de Molulco, identificado como Aladín del Carmen Quinán Guenteo, viudo, de 49 años, quien vive junto a su madre en condiciones de abandono miserables en una casa facilitada por una vecina, dio a conocer el párroco de Quellón Carlos Cárdenas.
El sacerdote señaló que, a su juicio, este caso representa "una realidad que nos golpea como sociedad, no es posible esa falta de dignidad en la vida de un ser humano".
El religioso de la Parroquia Nuestra Señora del Carmen relató la infrahumana existencia de este isleño que hasta mayo de este año se dedicaba a trabajar en faenas propias del campo, fecha en que sufrió un accidente vascular que lo dejó postrado y absolutamente dependiente para resolver sus necesidades.
"Llegué a este hombre por la enfermera Rosa Millán, quien me invita a conocer esta realidad. Al llegar a la casa quedé impactado porque está en un abandono total. Él vive con la mamá, quien tiene problemas con el alcohol; por lo tanto, es una mujer que no tiene mayor conciencia de lo que tiene su hijo. Él esta postrado en cama", mencionó.
Cárdenas reveló sobre este drama que "es una casa que tiene pésima ventilación, con mucho nailon por ventanas y hoyos en las paredes por donde entran ratones".
Motivación
Muy afectado, el sacerdote reveló por qué da a conocer esta situación: "Tuve que ir a retirarlo de su casa porque estaba solo, en muy malas condiciones. No había sido alimentado, sin fuego, manifestaba tener mucho frío, la casa estaba cerrada con un cordón en la puerta y la mamá no estaba".
Lo que observó el religioso al interior de la casa es el estado calamitoso en que se encuentra el paciente, en un entorno insalubre, donde ni siquiera hay agua potable. Sumó que tampoco se le suministran los remedios que le fueron recetados y que el paciente permanece postrado en un colchón sobre un rústico armado de madera.
Esta situación límite motivó que el padre Carlos llamara a las autoridades de salud de la comuna de Quellón a fin de obtener ayuda. "Primero hablé con Yanibel Contreras, a cargo del cesfam, y luego con Carlos Zapata, director del hospital, quienes ofrecieron colaborar", consignó.
De esta forma partió el cura en su propia camioneta a buscar a Aladín el martes recién pasado a fin de trasladarlo hasta el nosocomio del sur de la Isla, lugar donde se encuentra momentáneamente. "Está muy bien cuidado y aseado, pero no es el rol del hospital tener personas postradas", reconoció el líder católico, advirtiendo que Quinán Guenteo podrá quedarse en el recinto solo hasta el viernes 28. Para después de esa fecha únicamente hay incertidumbre respecto al destino de este hombre de Molulco.
Cárdenas ha hecho las gestiones para ubicar a este paciente en algún hogar de ancianos, de los que existen en la provincia, pero no califica por no contar con la edad mínima necesaria. "¡No es posible que en algunas comunas no existan hogares o instituciones que puedan responsabilizarse de estos casos que involucran a seres humanos, en este caso en completo abandono!", exclamó.
Mientras tanto, y con el calendario en contra, el padre Carlos solicita ayuda para socorrer a este hombre en caso de no encontrar un lugar donde lo acojan. "Estamos recolectando enseres, ropa de cama, útiles de aseo, cortinas, y dinero, porque en caso de no encontrar un hogar de aquí al 28 de octubre tendrá que volver ahí (a Molulco) y entonces deberemos hacer las reparaciones que sean necesarias al lugar y conseguir un sistema de calefacción", mencionó.
La fuente agregó que en ese caso diversas personas deberían turnarse y trasladarse desde Quellón a objeto de ir a alimentar al paciente, a mudarlo y a calefaccionar la casa. Esto a pesar que el lugar donde vive Aladín pertenece administrativamente a la comuna de Chonchi.
Emplazamiento
El sacerdote hizo un llamado urgente a la comunidad a tomar cartas en este asunto, a fin de contribuir a darle una mejor calidad de vida a este vecino. "Las autoridades deberían preocuparse con urgencia de crear una institución, un hogar que pueda responsabilizarse por esto. No es justo ni digno estando en pleno siglo 21 que no haya un lugar que pueda acoger a estas personas", denunció.
El párroco de Quellón finalizó con una reflexión: "Tenemos que darle dignidad a las personas, sobre todo a las personas como Aladín que no tienen mayor complejidad, sino que simplemente el estar postrado en una cama y no poder hacer sus necesidades por sí solo ni asearse".
La ayuda se está canalizando directamente en la Parroquia Nuestra Señora del Carmen de Quellón. Para mayor información el interesado se puede contactar al teléfono 65-2681439.
"Tuve que ir a retirarlo de su casa porque estaba solo, en muy malas condiciones. No había sido alimentado, sin fuego, manifestaba tener mucho frío...".
Carlos Cárdenas,, párroco de Quellón."