Ricardo Mundaca Izquierdo
El gobernador provincial René Garcés en su última visita a Inío, apartada localidad de la Isla Grande de Chiloé a la que solamente se accede por mar o tierra, reconoció que la caleta vive la permanente complicación de no contar con telefonía celular.
"Lo único que funciona es la radio, y hoy la municipalidad de Quellón, junto a Onemi (Oficina Nacional de Emergencia) le han entregado otro equipo de comunicaciones, que es tan necesario", expresó el achaíno sobre el otorgamiento de handies para la comunicación de estos vecinos que fueron de los que más sintieron la intensidad del terremoto de la Navidad.
Garcés encabezó a horas del primer viaje, un segundo que incluyó a civiles y militares, llevando a algunas instituciones que los pobladores "nunca habían conocido", como el Servicio Nacional de Geología y Minas (Sernageomin) y la Onemi.
Agregó el representante del Ejecutivo en el Archipiélago que existe un compromiso con la autoridad para que en enero comience a entrar en funciones una antena de telefonía celular.
Además, respecto de la demanda local de contar con refugios para emergencias sísmicas y de maremoto, "para que la gente pueda entender, Inío es una zona que está abierta. El terremoto que se produjo en Japón produjo acá olas bastante grandes, por tanto la gente tiene preocupación y temor", advirtió. Con ello aludió a la inundación que se vivió en la caleta tras el tsunami del 11 de marzo de 2011.
Miguel Nenén, presidente de la Junta de Vecinos de Inío, consignó que "el alcalde (Cristian Ojeda) ya nos dio la noticia que se construiría el 2017 el refugio de Punta Rocosa. También contento por la entrega de dos equipos de radio de la Central Omega para estar más comunicados en caso de alerta, y por la restauración de la rampa (cuyo arreglo está en evaluación)".
A su vez, el jefe comunal (DC) ratificó que "hay algunas fisuras en la posta pero está funcionando en forma normal, la escuela también", acotando que el poblado también contará próximamente con internet.
Sernageomin
En tanto, el geólogo Paul Duhart, de la oficina técnica con base en Puerto Varas de Sernageomin, señaló respecto a su visita que "prestamos asistencia técnica a los servicios públicos cuando ocurre alguna situación como esta. En el caso de Chiloé, estamos investigando los efectos superficiales del terremoto. Estos pueden ser, por ejemplo, las remociones en masa, las cuales no hemos observado. Podrían ser también efectos de alzamientos o hundimientos, generación de fracturas o de grietas en el suelo, lo que obviamente tiende a desestabilizar el terreno y podría provocar daños en viviendas o infraestructura".
"Esa es nuestra tarea -sumó-: generar información respecto de los efectos superficiales del terremoto para ser entregada a las autoridades para que cuenten con información para poder tomar decisiones".