Acreditan feroz asesinato de obrero en Quellón
Pese a que joven fue condenado por el crimen, familia de la víctima teme que quede en libertad. Además, criticaron exigua pena que arriesga.
La versión entregada por dos testigos presenciales de la agresión fue clave para acreditar la responsabilidad de un joven en el macabro crimen de un obrero de Quellón. Pero estos mismos testimonios abrieron los reparos de los familiares de la víctima, quienes estiman que el asesino arriesga una exigua pena considerando la violencia del caso.
En audiencia realizada la tarde de ayer en el Tribunal Oral en lo Penal de Castro, la sala presidida por el magistrado Cristian Rojas condenó al acusado de iniciales F.A.Z.H. (20) por el delito de homicidio simple, al determinar que "interceptó" en la calle el 16 de agosto del 2014 a Abdón Lenin Colivoro Colivoro (47), "propinándole diversas heridas cortopunzantes que le provocaron su fallecimiento por anemia aguda", expuso en el dictamen.
Los dos sujetos que estaban al igual que el acusado durante esa fatídica jornada de invierno en el sector norte de la ciudad porteña entregaron antecedentes aclaratorios sobre la dinámica de la agresión y la participación del hoy condenado, quien tenía 17 años al momento de los hechos.
Ellos mismos dieron cuenta de las numerosas estocadas, las cuales, según la fiscal Karen Rosas, llegaron a once. Un antecedente que se sustentó con los informes científicos y las declaraciones de policías y peritos.
Delitos
Asimismo, como explicó Ingrid Colivoro, hermana del occiso, dentro del testimonio quedaron expuestas otras infracciones que nunca se pesquisaron.
"Los mismos jóvenes indicaron que le sustrajeron dinero, aunque hayan sido 400 pesos. También mi hermano perdió sus herramientas y no solo el alcohol se llevaron como se dijo. Por ello, acá estamos ante un asalto, además no fue un solo corte... el autor se ensañó con Abdón, le picó todo el cuerpo, hasta sufrió lesiones en las axilas. Además, lo dejaron botado en la calle para que se desangrara", aclaró la vecina.
Con estos datos, un delito de robo con homicidio o el agravante del ensañamiento podrían haberse configurado, pero los mismos parientes criticaron la indagatoria, señalando que no se periciaron otros hechos. "Nunca se investigó a los amigos del acusado, por lo menos son cómplices. Uno de ellos también le pegó", añadió la pariente, concluyendo que esta misma falta de acuciosidad se verá graficada en la sentencia.
reinserción
La fiscal Rosas, quien solo tomó esta causa en el juicio oral, ya que la investigación fue de Rodrigo Valladares, ratificó su solicitud de pena de 4 años de internación en régimen cerrado con programa de reinserción social. Enfatizó que es una pena "proporcional, idónea y ajustada" dentro de la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente (LRPA), considerando también la irreprochable conducta anterior del condenado.
Asimismo, la persecutora -no presentó la acusación- recalcó que un eventual delito de robo "no sería posible de acreditar, ya que no hay antecedentes de preexistencia de especies".
Bajo este escenario, los parientes de la víctima no pueden aspirar a una pena superior. Incluso, temen que el asesino pueda quedar libre, lo que se resolverá este miércoles en la misma sala penal.
Defensa
El defensor Rodrigo Rojas invocó una pena de 3 años y un día de libertad asistida especial. El abogado argumentó su solicitud "con el concurso de la irreprochable conducta y la condición de menor de edad del acusado al momento de los hechos". Además, indicó que la LRPA "persigue otros fines a la internación, como son la reinserción social", sumando que el homicidio subsume la extensión del mal causado, por lo que no podría aplicarse en la pena.