Carolina Larenas Faúndez
El martirio que vivió Jesús en su camino a la cruz fue recordado ayer por los fieles católicos en distintos puntos de la provincia. Algunas por la mañana y otras ya en la tarde, pero las comunidades cumplieron con la conmemoración del viacrucis.
La guerra en Siria, el hambre que hay en distintos países, las persecuciones, los adultos mayores que son abandonados, la vulneración de los derechos de los niños, así como las mujeres que son asesinadas por sus propias parejas, son algunos de los sufrimientos por los que los creyentes rezaron en las distintas estaciones que componen este recorrido.
A eso de las 9 horas en la capilla San Pablo se inició ayer el recorrido en el sector alto de la ciudad de Castro, ruta que se internó por distintas poblaciones para terminar en la capilla Sagrada Familia en Camilo Henríquez.
Más de un centenar de personas se sumaron a esta celebración religiosa en la que se recuerda la pasión de Cristo en su camino hacia el calvario. Pero no solo en las poblaciones castreñas se vivió este momento de recogimiento, sino que también en distintas iglesias de diversas comunas como lo ocurrido la tarde de ayer con los fieles que asisten el templo San Francisco.
José Andrade, párroco de la parroquia Sagrado Corazón, explicó que "hay tantas situaciones de dolor, tantas situaciones de cruces que hoy los hermanos siguen cargando como los problemas económicos, sueldos que no son dignos, jubilaciones que no alcanzan, tantas situaciones de abusos que se están dando".
Asimismo, el también vicario general de la diócesis San Carlos de Ancud mencionó que "hacer el camino del viacrucis es recordar que hoy Cristo sigue sufriendo a través de tantos hombres y mujeres, jóvenes y niños que claman también por nuestra ayuda, claman también por nuestra solidaridad".
El sacerdote expresó que "el llamado es a la reflexión a profundizar, en primer lugar por el inmenso amor que Dios nos tiene, el camino de la cruz es un camino de sufrimiento de humillación, de la vergüenza y él lo asume por amor a nosotros".
Recorrido
14 fueron las estaciones que los fieles prepararon para recordar el martirio que vivió Cristo antes de su muerte. La fe y la devoción llevaron a los devotos a sumarse a esta conmemoración en distintas localidades.
Entre el lugar en el que se ubica el supermercado aCuenta y el cementerio Municipal de Castro se instaló una de las estaciones, en ella una de las personas que esperaba el arribo de la procesión era Milagros Oyarzún, quien comentó que "este es un deber que tiene uno, el respetar su religión y viene uno a agradecer todo lo que Dios hace por uno".
Además, la vecina manifestó que "hay algunas personas que no están de acuerdo con esto, pero yo sí, siempre aunque no lo hago todos los años, cuando me nace de adentro".
Por su parte, Mariana Aguayo, otra fiel del sector alto de Castro que se sumó a la conmemoración, argumentó que "este es un compromiso que uno tiene al ser un católico, es algo por amor a Dios, esto no se hace solamente por obligación, yo participo de esto como católica, como cristiana, de caminar con Jesús al Calvario".
15 horas, dicen los Libros Sagrados, se produjo la muerte de Cristo.