Secciones

Lluvias otra vez se ensañan con el centro de la provincia

El agua erosionó caminos secundarios y también inundó calles, patios y viviendas en Chiloé, especialmente en Castro. Bomberos de diversas comunas se acuartelaron debido al sistema frontal.
E-mail Compartir

Luis Contreras Villarroel

Nuevos trastornos se vieron ayer por el mal tiempo en la provincia, particularmente en el centro de la Isla, siguiendo la tónica de los últimos temporales en Chiloé.

Las intensas precipitaciones y rachas de viento que alcanzaron los 60 kilómetros a la hora, según datos del aeródromo Mocopulli, que obligaron a desplegar los servicios de emergencia, sobre todo en Castro, con los equipos municipales y bomberiles correspondientes.

Los problemas se agudizaron pasadas las 14 horas coincidiendo con el incremento del sistema frontal y la fuerte acumulación de aguas en calles y caminos de diferentes barrios de la capital chilota y alrededores.

Uno de las principales dificultades que movilizó a las cuadrillas de trabajo se focalizó en las cercanías del colegio San Crescente, en Ten Ten, donde el agua anegó algunos predios particulares.

A su vez, la lluvia hizo de las suyas en el centro comunitario de salud familiar y la sala cuna y jardín infantil Arco Iris, ambos ubicados en el sector de Llau Llao. El recinto de salud sufrió la filtración de agua lluvia desde la techumbre, lo que obligó a suspender las atenciones y derivar a los funcionarios a sus domicilio.

Respecto del recinto de párvulos, Jeannette Santana, encargada de Salud de la Corporación Municipal para la Educación, la Salud y la Atención al Menor de Castro, explicó que "la lluvia solo anegó el patio de la sala cuna" agregando que "los niños fueron retirados por sus padres".

Otro de los focos de mayor dificultad se localizó en el barrio Pedro Montt II, donde el agua inundó tanto un tramo de la vía como una de las viviendas. "Acá vivimos hace 20 años y nunca había pasado, la lluvia comenzó como la 1 de la tarde y de repente empezó a salir de la taza del baño", apuntó Angélica Hernández.

La afectada añadió que "el agua entró a la casa, mi cocina tiene piso flotante, tiene el piso levantado".

Debido al anegamiento los pobladores ayudaron a extraer con balde el líquido desde el inmueble anegado, mientras los demás vecinos habilitaban verdaderas barreras de contención.

En el lugar se hicieron presentes voluntarios del cuerpo bomberil que con el apoyo de una motobomba procedieron a extraer el agua acumulada en el antiguo barrio.

Una situación similar se registró en la calle Aureliano Velásquez, en la población Camilo Henríquez, donde se inundaron algunas propiedades, debido a que se taparon las vías de evacuación de aguas lluvias por piedras.

Otros puntos con problemas se detectaron en calle Fernando Márquez de la Plata con Facundo Pérez, Quinta Ramos; el camino a Las Antenas; barrio Quinchén, y la villa Esperanza.

Además, en redes sociales se posteaban inundaciones en predios en la ruta al vertedero municipal y cortes del camino de Nercón Alto.

Al sur, específicamente en Gamboa un gran sauce sucumbió ante el reblandecimiento del terreno para caer hacia la calzada dejando obstaculizada una de las vías de la Panamericana, generando un taco de proporciones.

Una de las medidas preventivas surgió con la suspensión de clases en el colegio Cahuala Insular y la sala cuna Arco Iris, ambos ubicados en el sector de Llau Llao.

De acuerdo al reporte del aeródromo de Mocopulli, entre las 9 horas del lunes y el mismo horario de ayer precipitaron 60,4 milímetros de agua en este sector de Dalcahue. El registro que se da a conocer hoy superaría esa cifra, dado que incluye la contingencia de ayer. Además, el mal tiempo seguiría, al menos, hasta este miércoles.

OTROS PUNTOS

En otras emergencias de la provincia, destacó el caso de dos casas de calle Condell en Chonchi que sufrieron el ingreso de agua, por lo que debió trabajar Bomberos.

En forma preventiva, además, se efectuaron obras de limpiezas de cunetas y pequeños cauces, como sucedió en Las Canteras con el pasaje El Esfuerzo de Ancud y en las cercanías del Liceo Polivalente de Quellón. En ambos casos laboró personal municipal.

Al cierre, se evaluaban problemas en Apeche en Queilen y en Aucar en Quemchi.