Los atracos a centros de enseñanza en la Isla no se detienen. Así lo constataron en las últimas horas los 60 alumnos del Jardín Infantil Amigos por Siempre de Quellón, emplazado en camino San Antonio, después que un solitario malhechor violentara las instalaciones para apoderarse de equipos computacionales.

Hace un lustro que se encuentra en este sector el recinto que por primera vez sufre los embates de la delincuencia. Así lo consigno su directora, Marleny Nehuel, enfatizando que Carabineros le comunicó sobre el atraco y al constituirse en el lugar corroboró que el responsable solo concentró su accionar en una oficina.

"Un vecino se percató que una persona entró a robar y denunció el hecho. Al llegar la puerta estaba abierta y en la entrada había un cuchillo con el cual habrían forzado la puerta principal. No se demoró mucho el autor y solo se apoderó de dos computadores que estaban en una de las dependencias", acotó la educadora.

Los antecedentes aportados por el testigo activaron el procedimiento policial. Sin embargo, sería la abuela del sujeto a quien le encontraron las especies quien catapultó el esclarecimiento de los hechos.

Como manifestó la propia afectada, "nos indicaron que esta señora se percató que su nieto llegó borracho a la casa con dos computadores, por lo cual los devolvió el mismo día".

Los equipos fueron entregados a la misma unidad base de la Sexta Comisaría, razón suficiente para agilizar las diligencias para la captura del joven de iniciales R.P.P.

El comisario Darwin Illanes aclaró que personal de la Sección de Investigaciones Policiales (SIP) se encargó del dispositivo, llegando a la aprehensión del imputado por el delito de receptación.

Audiencia

En el Juzgado de Garantía porteño se realizó la audiencia en que el magistrado Andrés Arteaga declaró ajustado a derecho el procedimiento de captura, en el mismo domicilio del isleño. Además, este sujeto fue encausado por este ilícito, decretándose un plazo para indagar de 60 días.

Según la fiscal Karen Rosas, la familiar del imputado "entregó antecedentes relevantes para el caso", lo cual también permitió "la recuperación de las especies".

Asimismo, la persecutora manifestó que "las diligencias están activas por parte de la SIP con el objeto de esclarecer el robo", por lo cual no se descarta que este mismo joven pueda ser reformalizado.

Pedro Bárcena González

En un confuso incidente registrado en pleno centro de Quellón, una mujer está siendo acusada de provocarle graves lesiones a un comerciante. Un ataque por el cual la joven arriesga 3 años de cárcel y que dejó en evidencia la indefensión de quienes atienden negocios ante las embestidas delictivas.

En el Tribunal Oral en lo Penal de Castro se realiza desde ayer el juicio contra la operaria salmonera identificada con las iniciales K.C.P. (24), quien es sindicada como la responsable de causar un profundo corte en el rostro a un vendedor utilizando un arma blanca, como también de la fractura mandibular que sufrió la misma persona tras recibir el impacto de una piedra.

Los hechos se registraron la tarde del 28 de octubre del 2016, a las afueras del minimarket "La Quillotana 2", emplazado en calle Juan Ladrilleros, a menos de dos cuadras de la Sexta Comisaría local.

Como enfatizó la fiscal de la causa, Karen Rosas, el afectado recibió este ataque después que la imputada y otros dos sujetos ingresaran al local con la intención de sustraer especies. "En un acto diverso recibió una agresión directa y artera, en venganza por ser sorprendida (la acusada) hurtando", acotó.

En sus alegatos, la persecutora detalló que la isleña arrojó una piedra al recinto y quebró un vidrio, por lo cual el locatario salió en defensa de su patrimonio, siendo abordado por el grupo.

Como describió el hijo de la víctima, quien también atiende el establecimiento, uno de los individuos "tomó por detrás a mi papá y la mujer lo agrede. Yo estaba en el suelo forcejeando con el otro sujeto, por lo que solo vi cuando tenía el rostro ensangrentado", relató en estrado.

Video

Unas de las pruebas que mayor valor tiene para el Ministerio Público, junto a la declaración de testigos, son las grabaciones del sistema de seguridad que posee el recinto comercial. Justamente, en estas imágenes se observa el altercado y cómo el vendedor reingresa para atenderse sus hedidas.

Para la defensa, representada por el abogado Ignacio Díaz, la evidencia no es suficiente para "acreditar que la joven arrojó la piedra que impactó en la victima", ante lo cual solicita la absolución de los cargos por lesiones graves. Sin embargo, reconoció la participación en el ilícito de daños.

Asimismo, el profesional recalcó que en el mismo video "se ve que los dependientes salen armados a enfrascarse en una riña y ahí surgen las lesiones. Un tercero sería el que arrojó la piedra", la cual provocó una fractura bilateral de la mandíbula del comerciante, que registró una incapacidad superior a los 40 días.

Durante la jornada de este martes se presentó toda la prueba ante la sala presidida por el magistrado Claudio Ayala, mientras que para hoy se esperan los alegatos de clausura y el veredicto contra la operaria, quien se encuentra con cautelares en el medio libre.