En una jornada marcada por los consejos nacionales de partidos de centroizquierda y haciendo precisamente un llamado a la unidad del bloque, el Partido Progresista ratificó la candidatura presidencial de Marco Enríquez-Ominami.
Durante la reunión de ayer, el líder del partido, Camilo Lagos, apeló directamente a los presidentes del Partido Socialista, Álvaro Elizalde, y del Partido Radical, Ernesto Velasco, a "abrir las puertas" y "entender que sólo la unidad podrá detener el avance de la ultraderecha empresarial que hoy encarna Piñera", aduciendo que son quienes "más freno han tenido a un posible acuerdo amplio de todas las fuerzas progresistas".
Calculadora
Enríquez-Ominami, quien fue ratificado de manera unánime, se sumó a las palabras de Lagos, reiterando que los dirigentes políticos deben "guardar la calculadora" y dejar de "mirar por el retrovisor".
"No se trata de nosotros, se trata de Chile. Este no es el día de los partidos, es el día de los partidos para Chile, para hablarle a todo Chile, y para hacer eso hay que partir por una mayoría", expresó el candidato.
ME-O presentó tres pilares que son el punto de partida del programa de la candidatura: educación pública y gratuita, no más AFP y reactivación del empleo.
"El PRO ha tenido grandes aciertos y ha tenido derrotas, y hemos aprendido que juntos llegamos más lejos. Los invito a dejar de lado sus propios intereses", agregó, afirmando que su colectivo "pone a disposición toda su capacidad y todo su coraje para construir una gran lista parlamentaria, ojalá única" que conglomere a las fuerzas de centroizquierda y para dar su apoyo a un candidato presidencial único.