Lluvias complican las faenas de búsqueda en la Villa Santa Lucía
Las lluvias intermitentes complicaron ayer las faenas de búsqueda y despeje de material que dejó el aluvión que destruyó el sábado gran parte de la Villa Santa Lucía, próxima a Chaitén, en la comuna de este nombre, a causa del desprendimiento de una parte del glaciar Yelcho. El hecho provocó la muerte de 14 personas, mientras que ocho permanecían ayer desaparecidas.
La preocupación se incrementó con el análisis que realizaron expertos del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), del Ejército y de la Dirección Meteorológica de Chile.
Los meteorólogos pronosticaron precipitaciones intensas para esta jornada, con una isoterma que llegará a los 1.300 metros sobre el nivel del mar en la mañana y que subiría a los 1.700 por la tarde. De ocurrir, esto significará que lloverá en una zona donde siempre nieva, lo que facilitaría el arrastre de material hacía el valle.
Lo peor es que la revisión hecha ayer a la zona corroboró que las grietas dejadas por el aluvión del sábado tenían "colgando un cerro", que, de caer, impactará a una laguna y arrastrará material nuevamente sobre el pueblo.
"Tardaría unos tres minutos en llegar a la villa", precisó a los medios el geólogo Gonzalo Hermosilla.
El escenario hizo que por la mañana el Gobierno ordenara la evacuación de los 560 funcionarios externos al pueblo que trabajan en este lugar de la provincia de Palena.
Sin embargo, como el tiempo mejoró al mediodía, se levantó parcialmente la medida de prohibición de circulación por la zona e ingresaron equipos de rescate para rastrear "zonas puntuales" en que había antecedentes de vecinos sobre posibles cuerpos.