Desgracias en el mar enlutan a los pescadores
Las tragedias marítimas golpearon fuerte en la jurisdicción chilota, lo que fue refrendado recientemente con el último y grave accidente en caleta Zorra, al oeste de Quellón, donde la lancha a motor Francisco naufragó el 20 de diciembre con seis tripulantes en su interior, dos de los cuales fallecieron.
Un amplio operativo de rescate se realizó en esta apartada zona para evacuar a los sobrevivientes y ubicar a la última víctima fatal, encontrada dos días después del siniestro en los roqueríos del área.
También en el sur de la Isla, otras dos personas perdieron la vida el 15 de abril, luego de caer al mar desde el bote en que transportaban leña, desde el sector Cheter a Quellón urbano.
En la isla Meulín (Quinchao), la lancha Yerko II zozobró el 17 de julio, lo cual provocó la muerte de un tripulante y el rescate de otros tres, quienes resultaron con hipotermia. Además, el 30 de ese mismo mes, falleció un kayakista en el lago Huelde (Chonchi), tras volcar la embarcación.
El 31 de agosto, la lancha Señora Ely naufragó en el golfo de Ancud, dejando como saldo tres personas fallecidas y otros cuatro sobrevivientes. El último de los cadáveres recuperados fue el del vecino de Chacao Claudio Canío, quien fue hallado seis días después en la isla Talcán de las Desertores.
A estos accidentes se sumaron otros, por lo cual la Armada, más al comenzar un nuevo año, reiteró el llamado al autocuidado a todos los hombres de mar.
"Se periciaron dos cadáveres y lograron hallar fuentes de calor dentro de la casa"
Manuel Angulo, del Labocar, por incendio en Apiao"