Apuestan a la diversificación con productos en base a algas
Recurso bentónico ha permitido idear una serie de innovadoras preparaciones gastronómicas.
Innovadores productos gastronómicos, como pan, galletas y hasta pizzas elaborados con harina de algas, se están desarrollando en el marco del curso "Cultivo y recolección de algas y especies bentónicas en borde costero", proyecto que se desarrolla en el sector de Estaquilla, comuna de Los Muermos, y que es impartido por otec (organismo técnico de capacitación) Capacitaciones Chinquihue de la Fundación Chinquihue.
Son alrededor de 20 los beneficiarios, la mayoría perteneciente a la Asociación Alguera La Pampina, quienes trabajan en este interesante iniciativa que busca diversificar el uso de las algas que ellos mismos plantan y extraen de la zona.
Los objetivos del trabajo tienen que ver con labores de plantación, cosecha, limpieza, secado, cultivo y recolección, para luego finalizar con la comercialización de estos productos gastronómicos, implementando una elaboración que sea innovadora.
Gracias a estos conocimientos es que los participantes lograron adquirir nuevas herramientas técnicas, lo que les permitió producir galletas de cochayuyo y de luga, pizza de cochayuyo, chocolate con cochayuyo y alga y pan de cochayuyo y de luga.
Claudio Pérez, gerente general de Fundación Chinquihue, calificó este curso como innovador en el ámbito gastronómico. "El proyecto ha sido bastante innovador, en el sentido que se trataba de un trabajo en el que se buscaba ofrecer técnicas de recolección de algas y nosotros lo transformamos en el tiempo en un proyecto en el que no solo recolectamos, sino que transformamos el producto", aseveró.
El profesional aseguró que, en el contexto actual y proyectándose al futuro en el ámbito alimentario, este tipo de iniciativas tiene grandes ventajas. "Hoy se busca acceder a productos con un mejor nivel nutricional y que sean naturales, fundamentalmente, sin ningún tipo de intervención. Yo creo que desde ahí hay un camino importante por el cual desarrollar esta innovación", indicó.
Carla Olate, bióloga marina en proceso de obtener el grado de doctora en Acuicultura por la Universidad Autónoma de Barcelona, fue la encargada de dirigir este curso. Reveló que "en este momento estamos innovando con el tema de las harinas, porque la gente en general vende sus productos tal como los obtiene del mar. Van a la playa, lo sacan, lo secan y lo venden. Nosotros estamos haciendo algo ya más elaborado".
Los usos más populares de las algas han sido históricamente en la industria cosmética, la alimenticia y la dental.
"Las algas se caracterizan por ser ricas en fibra, sales minerales, magnesio, calcio y propiedades antioxidantes, lo que las convierte en un importante alimento, ya que previene enfermedades como la obesidad, cáncer, además de tener atributos fotoprotectores", manifestó la científica.
Este es, sin duda, un tema innovador para la gente de La Pampina. "Para ellos sería una entrada importante de recursos lo que les permitiría aumentar sus remuneraciones en base a un simple tratamiento de sus recursos naturales", explicó la experta.
BARRAS ENERGÉTICAS
Otro gran proyecto a partir de la utilización de algas liofilizadas (deshidratadas) es el que está desarrollando el Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC): la creación de barras energéticas saludables para consumo humano.
Con esto busca elevar la competitividad de la cadena de valor asociada al sector económico de las algas. El proyecto lo desarrollará desde marzo la Universidad Santo Tomás a través de su Centro de Investigación Aplicada (Capia).
Esta iniciativa promueve la diversificación productiva de organizaciones de pescadores artesanales de La Pampilla Los Muermos, Región de Los Lagos, logrando que estos se conviertan en proveedores claves en incorporación de nuevos productos de alto valor agregado a la industria alimentaria.