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Nicolas Massú ve con optismo la serie de abril ante Argentina en la Copa Davis

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Celebrado el triunfo de Chile ante Ecuador del fin de semana, ahora el seleccionado nacional piensa en Argentina, su próximo rival por la segunda ronda de la Zona I Americana.

El duelo se disputará el 6 y 7 de abril y aunque aún no está clara la sede, la ciudad de San Juan aparece como favorita.

Quien sabe de presión jugando en el país vecino es el capitán del equipo de Copa Davis, el viñamarino Nicolás Massú, y quien tras el triunfo 3-1 ante Ecuador, manifestó que "para mí es un orgullo poder jugar con Argentina".

El doble medallista olímpico guarda respeto por el país vecino. De hecho, ahí ganó su primer título y aseguró: "Me formé como jugador entre Chile y Argentina".

Sobre el rival, el extenista mencionó que está "feliz de poder jugar con los equipos que de verdad han estado en instancias finales. Ellos ganaron la Copa Davis hace un año, entonces qué mejor para ellos (jugadores chilenos) que poder jugar contra los excampeones del mundo".

Los albicelestes no contarán con Juan Martín Del Potro, pero aun así son favoritos de la serie. "Ecuador, para ganarnos a nosotros, tenía un poco más de chances al jugar a tres sets y nosotros con Argentina, al jugar a tres sets, también tenemos un poco más", explicó Massú.

Cerró el viñamarino que "al jugar partidos a tres sets hay un poco más de presión, más cuando hay un equipo que, en el papel, es un poco más fuerte. Ahí los niveles se igualan un poco y eso puede pasar en la serie con Argentina".

Pilotos destacaron paso de la Fórmula E por Chile

Varios competidores aprobaron al público y las condiciones del asfalto en Santiago, pese a las primeras críticas que generó la superficie.
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La cuarta fecha del campeonato mundial de la Fórmula E que se corrió en Santiago resultó ser todo un éxito, en cuanto a audiencia y concurrencia. Eso, a pesar que hubo destrozos en el área, incluyendo la estatua de "Ícaro y Dédalo" de Rebeca Matte, frente al Museo de Bellas Artes, avaluada en 300 millones de pesos.

La carrera atrajo la atención de 200 millones de televidentes y cerca de 40 mil espectadores, que pese a la alta temperatura, no quisieron perderse este evento internacional. Pero no solo fue un logro en ese sentido. El circuito de 2,47 kilómetros también pareció todo un éxito para los verdaderos protagonistas de esta prueba.

Los pilotos que estuvieron acelerando a fondo en el Parque Forestal no dudaron en elogiar el trayecto metropolitano. "He vibrado con el público, que fue muy cariñoso, y también creo que el circuito reunió las condiciones para el desarrollo de una linda carrera. Estoy maravillado, quiero volver el otro año", afirmó el alemán Andre Lotterer, quien resultó segundo tras su compañero de equipo, el francés Jean-Eric Vergne ganador de la prueba.

Otro que también aprobó la capital chilena fue el competidor Lucas Di Grassi, quien pese a ser el monarca vigente de la categoría, sufrió su cuarto abandono consecutivo. "Correr aquí en Santiago ha sido una experiencia increíble. Ha habido mucha efervescencia del público y la pista estuvo bien", expresó el brasileño.

Opiniones que llaman la atención, si se considera que en la previa muchos pilotos se quejaron por los baches del circuito, que recordemos se corrió en 37 giros de 2,47 kilómetros.

"La ciudad demostró estar a la altura", fue lo que más se escuchó de parte de los competidores en el punto de prensa del Hotel Crowne Plaza, con lo que ponen presión para volver en 2019.

Un plato que puede repetirse, ya que el propio director ejecutivo de la Fórmula E, Alejandro Agag, demostró su intención de mantener a Santiago como sede. "Me encantaría seguir en Chile. Hay un nuevo gobierno, esperamos que les guste y quieran que sigamos. Si es por nosotros, continuaríamos. Conversaciones oficiales no hemos tenido", afirmó a El Mercurio.

De esta manera, el recorrido santiaguino cambió los cuestionamientos iniciales por elogios y parece proyectarse firmemente.