Castro: joven queda preso por letal accidente en la costanera
Después de más de siete meses el conductor fue formalizado por el siniestro vial en que falleció promisorio futbolista chilote. Familia de la víctima espera una sanción ejemplar, mientras la defensa apelará la gravosa medida cautelar.
El mismo día en que cumplió 27 años y a poco más de siete meses del fatal accidente que protagonizó, un joven dalcahuino fue formalizado por este siniestro vial registrado en la costanera de Castro. Y no sólo eso, en la misma audiencia se decretó la prisión preventiva en su contra. Por ello, tras las rejas comenzará a ser indagado por los tres meses que se dictaron para el desarrollo de las pesquisas.
Desde la jornada del 25 de noviembre del año pasado se estaban desarrollando las diligencias desjudicializadas por este caso. Una tragedia marcada por el consumo de alcohol y la imprudencia al volante, pero que no llegaba a tribunales.
Alrededor de las 5.10 de la madrugada de ese día, la camioneta conducida por el imputado de iniciales F.M.M.C., quien se trasladaba en compañía de Óscar Bahamonde y Sebastián Aguilar después de salir de una céntrica discoteca castreña, impactó con una garita y las barreras de contención de calle Lillo, para luego precipitarse al mar.
Los dos primeros jóvenes lograron salir del vehículo casi de inmediato, pero no así Aguilar Díaz, promisorio futbolista de 20 años, quien permaneció por varios minutos atrapado bajo el agua.
Como recordó el comandante de Bomberos, Fabián Gallardo, unos voluntarios "se despojaron de sus trajes y sacaron al joven, quien no tenía respiración ni pulso".
Deceso
A las 5.55 ingresó el deportista al Hospital de Castro bajo la reanimación realizada por personal del Servicio de Atención Médica de Urgencia (SAMU). Su estado era gravísimo, pero logró sobrevivir por tres días. Sin embargo, el paciente falleció el 28 de noviembre a las 10.15, producto de una encafalopatía hipoxia, generada por una asfixia por sumersión, como lo indicó el informe de autopsia del 3 de diciembre pasado.
Junto al dolor por la pérdida se extendieron las pericias que estuvieron a cargo de la Policía de Investigaciones. Un largo lapso se esperó para que sea encausada la indagatoria. La tardanza, como explicó el fiscal de la causa, Luis Barría, se debió por la necesidad de aguardar por los informes periciales y concretar todas las declaraciones para sustentar las imputaciones y esclarecer la dinámica del accidente.
"Aguardamos por los informes de alcoholemia y los antecedentes de la investigación, como los peritajes de la policía", acotó el persecutor, añadiendo que aún se espera por informes del Laboratorio de Criminalística (Lacrim) que determinarán los próximos pasos a seguir.
"Considerando estos datos, evaluaremos si es necesario solicitar pericias a la SIAT para complementar la carpeta indagatoria", añadió el persecutor.
Con la evidencia reunida, el representante del Ministerio Público procedió a formalizar al sujeto por los delitos de manejo en estado de ebriedad con resultado de muerte y daños, como también por huir del lugar del accidente.
El abogado solicitó la prisión preventiva argumentando que se tiene que aplicar en consideración "a la gravedad de la pena y la naturaleza de los delitos por los cuales fue formalizado". Una cautelar que fue acogida por el magistrado Sergio Villa arguyendo el peligro para la seguridad de la sociedad que implicaría la libertad del encartado.
Apelación
Ante este escenario, la defensora particular Vanessa Pérez, confirmó que apelará a la precautoria buscando otra de menor entidad, en base a su teoría del caso.
Por un lado, la profesional resaltó que no se configuraría la huida del lugar por parte de su representado. "La norma exige una ayuda posible (a la víctima), entonces él (imputado) estaba en estado de shock, apenas salió de la camioneta, por lo que es un asunto de lógica que no haya prestado la ayuda. Tampoco pudo llamar a la autoridad, puesto que ya estaban en el lugar la Armada, el SAMU y Bomberos", aclaró.
Por otra parte, la jurista reconoció que la medida aplicada es desproporcionada y que no existiría una necesidad tan gravosa de cautela, cotejando los antecedentes del caso. Por eso, postula como precautoria un arraigo.
"El hecho fue en noviembre y mi cliente prestó declaración el mismo día reconociendo ser el conductor. Se hizo el examen de alcoholemia, declaró tres veces ante la Policía de Investigaciones, ha colaborado, tiene irreprochable conducta anterior. Por ello, la prisión es muy gravosa", señaló Pérez.
Igualmente, la abogada detalló que su representado se encuentra bajo tratamiento sicológico producto de esta tragedia. "Murió su mejor amigo", enfatizó, sumando que el estudiante tiene una depresión moderada debido a lo ocurrido y hasta se encuentra con tratamiento farmacológico.
De esta forma, el imputado fue remitido al Centro de Detención Preventiva de Castro en el inicio de la investigación formal por este impactante caso, la cual se extenderá por tres meses.
"Evaluaremos si es necesario solicitar pericias a la SIAT para complementar la investigación".
Luis Barría,, fiscal de la causa"
"No se discute el delito ni autoria (en el manejo), al reconocer que es el conductor, aunque hay unos vicios en el procedimiento".
Vanessa Pérez,, defensora particular."
Querella
El 1 de marzo de este año la familia del deportista presentó una querella con el objetivo de acelerar las diligencia por esta causa, que recién esta semana fue formalizada en su investigación. La madre de la víctima, Mabel Díaz, quien sustenta el requerimiento recalcó que espera con esta acción legal encontrar justicia por lo sucedido con su hijo. "Me enteré de muchas mentiras que surgieron tras el accidente, por lo cual decidimos tomar acciones legales", aclaró la vecina, añadiendo que mayor dolor le causaba ver al imputado manejando sin mayores restricciones a pesar de lo sucedido. En cuanto a la cautelar decretada, la fuente acotó que "me da mayor tranquilidad, pero como madre esperamos que se haga justicia... han pasado siete meses y recién ahora fue formalizado".
1,14 gramos de alcohol por litro de sangre marcó la alcoholemia del conductor del móvil.
90 días se dieron para el desarrollo de las pericias indagatorias formales de la causa.