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Informe de ADN confirma las identidades de las tres víctimas de fatal incendio

Las pericias genéticas del Servicio Médico Legal arribaron en las últimas horas. Ahora familiares pueden retirar los cuerpos, aunque esperan evolución de las sobrevivientes. Internos de la cárcel de Castro entregaron sus raciones de dos días a víctimas de siniestro en la Inés de Bazán.
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Pedro Bárcena González - Pedro Bárcena González

Con el arribo de los informes del Laboratorio de Genética del Servicio Médico Legal (SML) de Concepción, en las últimas horas se corroboró por completo las identidades de las tres víctimas fatales del incendio que destruyó cinco viviendas en el sector Llau Llao, comuna de Castro, la madrugada del 12 de septiembre pasada.

El cotejo de ADN permitió establecer con un 99,99 por ciento de concordancia con las muestras analizadas, que se trata de Daniel Leal Ledezma (32), su hija Katalina (2) y de su hijastro Felipe Fuentes Rivera (9).

Estos resultados fueron informados por el médico Rodrigo Caro, del SML de Castro, quien enfatizó que para llegar a estas conclusiones se cotejaron las muestras "de la mamá del adulto fallecido, como también las otras dos muestras de los hijos de la mujer hospitalizada en Santiago".

El profesional recalcó que para llegar a estos informes se requiere a los menos ocho o nueve días para procesar las muestras de cartílagos, que se lograron rescatar de las víctimas. La contingencia del feriado largo influyó en este tiempo de espera, el que podría haber sido mayor si los restos evaluados hubiesen sido óseos.

"Los cuerpos se encuentran en la Unidad Tanatológica de Castro. Los familiares ya fueron avisados y se acercarán para la entrega y disponer de ellos para la sepultura que corresponda", apuntó Caro.

Pariente

Fernando Leal, padre de Daniel, resaltó que el informe de ADN de su hijo llegó primero y que este miércoles arribó el de los menores. Eso sí, advirtió que aún no existe claridad del día en que retirarán los cadáveres, ya que la familia permanece en Santiago acompañando a Caterine Rivera y su hija Emilia Leal, quienes resultaron con quemaduras de gravedad en el siniestro.

"La próxima semana tendremos todo más claro", enfatizó la fuente, añadiendo que "en el caso de Felipe, su papá vive en Antofagasta y se encargará de los trámites. Mientras que por Katalina, los abuelos maternos viajarán (a Castro), puesto que igual están en la capital".

Recuperación

En cuanto a la salud de las sobrevivientes, Leal detalló que la pequeña de 2 años que permanece internada en el Hospital San Borja Arriarán ha logrado evolucionar con mayor rapidez que su madre, quien está hospitalizada en la Ex Posta Central.

"Emilia está mejorando con más prontitud que Katerine. Ayer (miércoles) la desconectaron del ventilador mecánico. Sus pulmones están trabajando bien. A Katerine le ha costado un poco más, sigue estabilizada pero conectada. Ambas en la UCI (Unidad de Cuidados Intensivos)", concluyó.


Reos 'dejan de comer' para ayudar a damnificados

Con un espíritu de solidaridad ejemplar y reflejando que hasta el más necesitado puede ir en ayuda de la comunidad, los internos del Centro de Detención Preventiva (CDP) de Castro literalmente dejaron de comer dos días para cooperar con víveres a los damnificados del fatal siniestro que afectó la población Inés de Bazán.

Al enterarse de la tragedia que costó la vida del niño de 3 años Nathan Castillo Guichaquelen, destruyó tres inmuebles y dejó diez damnificados la tarde del 13 de septiembre pasado, los reclusos de la cárcel castreña se organizaron. Lo mismo ya habían realizado por las víctimas de los dantescos incendios forestales del verano del 2017, como también en otras emergencias locales. Sin dudar se movilizaron.

Carlos Esparza y Mario Cáceres fueron dos de los condenados que corrieron la voz, motivaron a la población penal e implementaron un comité para apoyar a estos vecinos del sector alto de la ciudad.

"Los internos sólo hemos perdido la libertad, pero seguimos siendo personas que sufrimos y nos emocionamos. También somos capaces de mostrar solidaridad con gestos sencillos, pequeñas ayudas que pueden darse en cualquier momento. Por eso, quisimos ayudar a estas familias", dijo Cáceres.

Esta disposición de los reos tuvo una positiva acogida por parte del alcaide Carlos Olavarría, quien potenció esta iniciativa.

"Nos reunimos y los internos tomaron la decisión de dejar de comer por dos días para transformar esta acción en comida en bruto -correspondiente a los días 18 y 19 de este mes-, en abarrotes y destinarla a la gente afectada de Inés de Bazán", apuntó el capitán, explicando que los reclusos "no pasaron hambre", ya que igual se les proporcionó alimentos en la unidad penal.

A esta cooperación se sumó a lo entregado por los parientes de los presos, juntando en total más de 250 kilos de alimentos.

El oficial tomó contacto inmediatamente con la presidenta de la Junta de Vecinos Inés de Bazán, Jessica Alvarado, para coordinar la entrega de las donaciones.

"No se esperaban este gesto, una ayuda de esta naturaleza de personas que están privadas de libertad, por lo cual se mostraron muy agradecidos", aclaró Olavarría, sumando que esta iniciativa será "premiada" aumentando el tiempo de visita para este domingo.

Valoración

En tanto, la líder vecinal ratificó que esta acción significa "un ejemplo para la gente y llama la atención por las condiciones en que están ellos. Las familias damnificadas se mostraron agradecidas por todo esto".

Además, la dirigenta valoró la empatía que tiene Gendarmería ante la desgracia. "Igual nos ofrecieron ayuda, mano de obra de los mismos internos para reparar las viviendas que resultaron con menos daños producto del incendio", subrayó Alvarado.

12 de septiembre ocurrió la tragedia en Llau Llao, Castro.