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hablan los participantes

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Víctor Gallardo, Colegio San Agustín de Quellón

"Es mi segunda caminata y vine para pedir por la hijita de un familiar que está muy delicada de salud. Soy creyente, confío en la iglesia pese a los cuestionamientos que ha recibido, sé que hay sacerdotes que se han equivocado pero siento que Chiloé está ajeno a ello", dijo.


Erwin Ojeda, proveniente del sur de la Isla

"Vine a sacar fotos y grabar imágenes para mi Facebook, me gusta mucho participar de esta caminata y lo mejor es que el tiempo nos ha acompañado no como el año pasado que llovió. Acá se siente la fe y la devoción que tenemos los jóvenes a Dios", acusó.


Víctor Vito, Liceo Galvarino Riveros

"Vine en esta ocasión con mis compañeros del grupo EJE, es algo bien bonito lo que acá pasa porque nos da la posibilidad de compartir con otros jóvenes de distintas partes de la provincia y vivir la caminata de una forma alegre, sana", puntualizó.


Cristel Muñoz, Liceo Ramón Freire de Achao

"He venido a muchas caminitas, inclusive con mis papás, me gusta este encuentro que protagonizan los jóvenes más aún porque yo creo en Dios, por lo mismo pienso que pese a los cuestionamientos a la Iglesia no podemos enjuiciar a todos", precisó.


Álex Cárcamo, Seminario Conciliar de Ancud

"Quise participar de esta caminata diocesana este año porque en mi antiguo colegio no se daba la oportunidad de hacerlo, estoy feliz de poder estar acá y tener la posibilidad de conocer y compartir con otros jóvenes, además de mis compañeros", consignó.


Juan María Agurto, obispo

"La caminata es un nuevo encuentro, una experiencia que se ha hecho habitual en nuestra historia como iglesia y los jóvenes siguen acudiendo porque todos necesitamos un camino que recorrer, buscamos la verdad y la vida y eso lo encontramos en Jesús", aclaró.

Jóvenes renuevan su fe ante una Iglesia en crisis en Décima Caminata Diocesana

Más de 700 personas se sumaron a este peregrinar que se desarrolló en Castro.
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M. Eugenia Núñez G.

Pese a los momentos complicados por los que atraviesa en la actualidad la Iglesia Católica chilena, con cleros cuestionados, unos desvinculados por el Papa Francisco y otros investigados por la justicia por casos de connotación sexual, fueron más de 700 jóvenes -según cifras de Carabineros- los que participaron de la Décima Caminata Diocesana, que este sábado se desarrolló en Castro y que reunió a misioneros de las diez comunas de la provincia.

Con la pregunta ¿qué haría Cristo en mi lugar?, el obispo de la Diócesis de Ancud, Juan María Agurto, se refirió a la misión que tienen como Iglesia para recuperar la confianza de la comunidad y enfrentar esta crisis.

"Justamente cuando comprobamos nuestra debilidad personal, social o eclesial necesitamos más apoyarnos en Jesús y aprender de él, por eso hoy nos preguntamos como el padre Hurtado en su tiempo. ¿Qué haría Cristo en mi lugar? Y tenemos que aprender y recuperar la fe y la esperanza y eso es lo que tenemos que buscar", consignó el clérigo, quien a través de una liturgia dio inicio a este peregrinar.

Por su parte, el padre Edito Raín, de la parroquia Juan Pablo Segundo añadió que "para nosotros esta caminata es muy especial, un momento que nos fortalece en este instante que estamos pasando como Iglesia tan difícil, y tener esta convocatoria con jóvenes, niños y sus familias es algo que realmente nos llena de gozo, porque aquí nos damos cuenta que el centro es Jesucristo y no somos nosotros los sacerdotes".

Distancia

Fueron más de 5 los kilómetros que los jóvenes recorrieron en una procesión que se inició en la iglesia Patrimonio de la Humanidad Nuestra Señora de Gracia de Nercón y que luego culminó con una misa en el templo San Francisco.

Siempre entonando alegres cantos y escoltados por Carabineros, los misioneros ratificaron su fe en Dios en esta caminata que llevó por nombre: "Jóvenes por Cristo en él y con él".

"Esta es la tercera vez que me sumo a la caminata diocesana y participo de ella porque es bueno demostrar la fe que uno siente hacia Dios, porque yo creo profundamente en él", manifestó el alumno del Liceo Politécnico de Castro, Rodrigo Pérez.

Finalmente, el sacerdote Luis Neum de la iglesia Santa María de Loreto de Achao destacó la alta convocatoria y el entusiasmo de los convocados.

"Este es el décimo año de la caminata y este año tiene un gran significado porque la iglesia está atravesando un período de mucha desconfianza que es una situación muy dolorosa, pero los jóvenes siguen haciendo su parte de la actividad pastoral y el desafío de cada uno de nosotros es poder ir generando espacios de confianza en nuestras parroquias", puntualizó el presbítero.