350 familias son las más afectadas por la falta de agua en los campos ancuditanos
Entrega del vital elemento por parte del municipio no ha cesado este año para vecinos de sectores rurales e incluso urbanos, destinándose unos $120 millones al año para pagar el arriendo de camiones aljibes más la compra del agua.
Un serio problema sostenido a través de los últimos años viven permanentemente 350 familias rurales de Ancud a consecuencia de la escasez de agua que se ha acentuado en Chiloé. El número se multiplica en los veranos.
Los grupos campesinos pertenecen a una veintena de localidades y forman parte de la entrega del beneficio todo el año, incluyendo la temporada invernal.
Esta ayuda, coordinada por el municipio, llega a través de tres camiones aljibes, dos del consistorio y uno del Cuerpo de Bomberos de Ancud, máquinas que una vez a la semana proveen el vital líquido exclusivamente para uso humano, vale decir, no para consumo de animales y riego de cultivos.
Según lo consignado por el jefe de la Dirección de Desarrollo Comunitario (Dideco) de la municipalidad, Carlos Vásquez, la problemática ya se canalizó -una vez más- a la Intendencia Regional para acceder a más recursos para paliar la crisis por la falta de agua que se ha tornado un problema crónico este siglo en la provincia.
"Hemos ingresado dos oficios formales para decirle a la Intendencia que la comuna de Ancud está con déficit hídrico y que necesitamos los recursos para poder contratar camiones aljibes", resaltó el funcionario.
Vásquez detalló que esta población rural afectada se focaliza en cuatro zonas primordiales, aunque también existe una urbana que depende de los servicios de los camiones estanques.
A ello se suma el pago de los honorarios al conductor del otro móvil que facilita la institución bomberil, sin olvidar el desembolso por la compra del vital líquido a la Empresa de Servicios Sanitarios de Los Lagos (ver recuadro).
A su vez, hizo ver que el agua que se provee es para uso exclusivo de los lugareños. "El camión pasa una vez por semana, son mil litros por familia y, obviamente, son para el consumo humano", sostuvo.
Acuerdo
Un acercamiento entre los representantes vecinales de las zonas auxiliadas y el municipio permitió recientemente acercar posiciones para ir en busca de una vía de solución por la crisis hídrica en la comuna.
Daniel Pantoja, presidente de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos Rurales de Ancud, deslizó que uno de los puntos convenidos consiste en generar una mesa técnica a la brevedad.
Tal instancia, al decir del líder social, la conformarían "los dirigentes de las diferentes juntas de vecinos rurales con profesionales y técnicos de la municipalidad".
"Queremos ver cómo se va a entregar agua (para la temporada estival, la más dura), cuánta se va a entregar, cuántos camiones aljibes van a haber y cuál es el presupuesto", compartió Pantoja.
La fuente enfatizó que la unión comunal aspira a ser parte efectiva en solucionar o mitigar este flagelo. "Somos los afectados, también tenemos algunas ideas que queremos proponerle a la municipalidad de cómo enfrentar el tema del agua", subrayó.
CATRUMÁN
La habilitación de pozos profundos o estanques de uso comunitario son las opciones que ya se utilizan como medios para disponer del recurso hídrico.
Esta experiencia se ve plasmada, por ejemplo, en los sectores de Pullihue, Catrumán y Chaumán.
Santiago López, presidente del Comité de Agua Potable de la segunda localidad, aseveró que "ha estanques comunitarios y el año pasado se construyeron algunos pozos, cuando para de llover no hay estanque que recibe agua lluvia".
Desde el municipio se mencionó que desde la Dirección de Fomento Productivo igual se está instando a los agricultores a buscar soluciones hídricas para la masa ganadera, considerando la importancia de la agricultura en el norte de la Isla.
"Hemos ingresado dos oficios para decirle a la Intendencia que Ancud está con déficit hídrico".
Carlos Vásquez,, director de Dideco de Ancud."
Gastos
Unos $120 millones para pagar el arriendo de camiones aljibes sin contar la compra de agua potable a la sanitaria Essal se prevé que se gastarán este 2018, faltando solamente 11 semanas para su fin.
Desde la Dideco de Ancud se hizo ver al Gobierno Regional la necesidad de inyectar más recursos para afrontar la falta de agua. Se estima que en el período peak de escasez habrá unas 50 localidades afectadas por la crisis.