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Dictan prisión para imputado de feroz asalto armado a empresa de Castro

Encapuchados maniataron de pies y manos a un guardia para acceder al recinto en busca de dinero.
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Pedro Bárcena González

Tras los informes emanados por personal de la Sección de Investigaciones Policiales (SIP) de Carabineros de Castro y que obligaron a ampliar la detención del único imputado -hasta el momento- por un asalto armado a una empresa, durante la jornada de ayer el sujeto fue encausado por el delito de robo con violencia e intimidación, quedando en prisión preventiva.

Por tres días se extendieron las diligencias para recabar antecedentes por este ataque que afectó las dependencias de Dimak, emplazadas en el sector Ten Ten. Peritaje a cámaras de seguridad, análisis de evidencia y empadronamientos fueron parte de este trabajo.

La información busca esclarecer la dinámica del ilícito y determinar las responsabilidades del atraco que se produjo la madrugada del lunes. Como indicó el teniente Sebastián Farías, de la unidad base castreña, la activación de la alarma del recinto, a las 3.50 horas, gatilló el operativo.

"Una patrulla se trasladó al lugar y sorprendió a una persona en las inmediaciones del establecimiento, a quien procedieron a fiscalizar. No contaba con su cédula de identidad, por lo que fue remitido al cuartel", apuntó el oficial.

Mientras se desarrollaban estas labores, otros efectivos procedieron a revisar las cámaras de seguridad de la distribuidora. Este análisis determinó que el sospechoso "tenía participación en el delito, por lo que fue detenido", explicó el uniformado.

Dentro de las diligencias se incluyó la declaración al vigilante que habría sido reducido por al menos dos desconocidos, como testificó. Agregó que fue interceptado cuando realizaba una ronda por el lugar. Los delincuentes, encapuchados y premunidos de armas de fuego, lo intimidaron. Terminó maniatado de pies y manos en una oficina.

El propio jefe de operaciones de la empresa en Castro, Mauricio Lizasoain, detalló que los ladrones "reventaron el candado de ingreso a la bodega tras reducir al guardia y revisaron el lugar. Estaban en busca de dinero y porque sonó la alarma escaparon rápido", sustrayendo solo dos celulares del vigilante.

Audiencia

Esta información fue expuesta en la audiencia de ayer por el fiscal Fabián Fernández, quien recalcó que el imputado de 39 años y de iniciales N.S.R.F. habría sido el encargado de vigilar el entorno mientras los otros implicados en el caso accedían y violentaban al guardia.

Justamente, el persecutor explicó que formalizó bajo las dos hipótesis, de violencia e intimidación, debido a que la víctima "sufrió lesiones leves en las muñecas y las piernas producto de las ataduras". Agregó que también fue amenazado con un arma que sería de fuego.

Asimismo, la fuente aseguró que gracias a las pesquisas efectuadas por la SIP se logró situar al encartado en el lugar de los hechos. Incluso, se realizó un ejercicio de posicionamiento con sus ropas que fueron incautadas, para la comparación con las imágenes de televigilancia.

Junto con sustentar la intervención del obrero domiciliado en Cartagena, Región de Valparaíso, el fiscal invocó la precautoria más gravosa para cautelar el éxito de la indagatoria. Argumentó que la prisión preventiva se justicia porque el imputado tiene múltiples antecedentes penales, como también por la gravedad, naturaleza y forma de comisión del delito.

"Se trata de un robo poco usual dentro de la provincia por los modos empleados, utilizando armas, con personas actuando a rostro cubierto", resaltó Fernández.

La magistrada Jesica Yáñez acogió esta medida y dictó un plazo de 60 días para la investigación.

Defensa cuestiona la participación

El defensor Juan Manuel Castro (foto) cuestionó la participación del imputado en el delito. Aclaró que la evidencia expuesta es insuficiente. Por un lado, recalcó que la declaración del guardia "es inconsistente, entregando apreciaciones distintas", tanto en su primer testimonio como en el vertido en Fiscalía. A su vez, el abogado indicó que "las cámaras de seguridad no tienen la resolución suficiente para individualizar a mi representado, considerando que constituyen la prueba base del persecutor. No se puede fundar participación con esta evidencia".

Además, el profesional advirtió que en el peritaje de los celulares incautados a su representado "aparece una conversación de 40 minutos, justo en el momento de los hechos. Y en las imágenes no aparece nadie hablando por celular", acotó, sumando que apelará la prisión preventiva en el tribunal de alzada.