Buzo pasará más de 8 años internado por ultraje a mujer y agresión a "amigo"
Ambos ataques se registraron en la costanera de Ancud, en medio de ingesta etílica.
A una pena de 7 años y 479 días de internación definitiva en un recinto siquiátrico fue sentenciado en las últimas horas un buzo por su responsabilidad en los delitos de violación y lesiones menos graves, perpetrados en el sector costanera de Ancud.
El isleño que padece esquizofrenia residual crónica cumplirá esta medida de seguridad en la Unidad de Siquiatría del Hospital Base de Puerto Montt. Así lo estableció la sala presidida por el magistrado Claudia Ayala, tras la audiencia realizada en el Tribunal Oral en lo Penal de Castro.
Los sentenciadores determinaron que el sujeto de iniciales F.J.A.S. (42) en un sitio eriazo de la avenida Salvador Allende, el 4 de mayo de 2016, "mediando fuerza, tomó de los brazos a la víctima -que padecía mudez- y la trasladó sin su voluntad" a un lugar para ultrajarla.
Además, el juez expuso en la resolución que el 19 de marzo de 2017, en calle Arturo Prat, el requerido utilizando un arma blanca tipo formón, agredió a un amigo con el que estaba bebiendo alcohol, "a causa de lo cual resultó con una herida contuso cortante posterior en la región escapula vertebral izquierda con neumotórax marginal, producto de la herida cayó al suelo y fue trasladado al Hospital de Ancud".
Informes
Por el delito más gravoso, pese a que no se contó con el testimonio de la víctima en el juicio, quien falleció el 26 de febrero de 2018, se acreditó la participación del hombre de mar gracias a los informes periciales bioquímicos del Laboratorio de Criminalística de la Policía de Investigaciones, que determinó la presencia del ADN del encartado en la muestra de secreción vaginal obtenida de la víctima.
Estas diligencias fueron complementadas con la declaración del testigo apodado el "Ñaja", pareja de la ofendida, quien relató ante los jueces cómo la mujer fue trasladada a un sector eriazo para ser violentada sexualmente.
Por el otro delito, que según el fiscal Javier Calisto correspondía a un homicidio frustrado, la sala estimó que solo fueron lesiones menos graves, "ya que el paciente nunca estuvo inestable", acotó el médico Óscar Betteta, agregando que el colapso del pulmón producto del neumotórax "fue leve, menos del 15%, calificado como marginal".
Dentro de las medidas dictadas por los jueces se resolvió que el director del Servicio de Siquiatría del Hospital de Puerto Montt, deberá informar semestralmente sobre la evolución del requerido al Ministerio Público y a sus familiares.
El persecutor recalcó que este ha sido una de las causas más difíciles de acreditar, en especial por la violación. "Había que comprobar un caso de una víctima que era muda y que además murió, no había testigos presenciales. Lo que salvó el caso es que la afectada explicó con gestos lo que había sufrido".
Es más, Calisto no dudó en señalar que "la situación vivida por la mujer era muy triste, desoladora, junto a sus problemas de salud, vivía en situación de calle, murió en la calle y le hicimos justicia de alguna manera con este dictamen".
Revisión
Por su parte, el defensor Luir Mora explicó que pese a que se mantuvieron las condiciones actuales de su representado en el recinto sanitario de la capital regional, "se puede revisar la internación definitiva y si está asegurado su tratamiento ambulatorio, puede salir en libertad", concluyó.
Estabilizado
El defensor Luis Mora enfatizó que "entendemos que está (el buzo) estabilizado, pero esto lo determinará ahora el Hospital de Puerto Montt". Además, manifestó en cuanto al delito de lesiones que los sentenciadores "acogieron nuestra postura, recalificando los cargos". Igualmente, aseveró el jurista, la situación médica del requerido "escapa de lo que podemos decir como abogados", pero insistió que la internación definitiva se puede revisar ante el Juzgado de Garantía de Castro.