Pedro Bárcena González

La incertidumbre y el dolor golpean a una conocida familia castreña, después de la muerte de su tesoro. Nicolás Estefo, de apenas 12 años, falleció ahogado mientras pasaba sus vacaciones en la comuna de Cholchol, Región de La Araucanía. Un siniestro que, según sus parientes, debe ser esclarecido. Incluso, anunciaron acciones legales para conocer todas las aristas que rodearon la tragedia.

El estudiante del Colegio San Francisco de Asís viajó junto a su madre y otros seres queridos hasta el campo de un tío, emplazado en este sector de la provincia de Cautín. Y en el primer día de permanencia y por razones que están siendo indagadas, se desató la desgracia.

El menor desapareció mientras se bañaba en el río Cholchol, ante lo cual se activó un operativo de búsqueda en el que participaron efectivos de Bomberos de esa misma comuna, como también de Nueva Imperial y Temuco.

Así lo confirmaron fuentes de la institución bomberil, aclarando que se formaron tres equipos de rastreo conformado cada uno por dos buzos. Un despliegue diseñado por los expertos del Grupo Especialista de Rescate Subacuático, Gersa.

Después de unos 40 minutos de exploración y a unas cinco horas de ser informado el extravío del niño, su cuerpo fue hallado por un bombero local. Permanecía en un pozo de más de 4 metros de profundidad.

Las circunstancias previas de su deceso permanecen en una nebulosa, como indicaron parientes que vivían con la víctima en Pedro Montt primer sector de Castro. Por ello, recalcaron que interpondrán una querella esta semana, para aclarar la muerte del estudiante, ocurrida hace nueve días.

Tal como explicó Alba Chaura, abuela del menor, "nos encontramos con una desesperación total. Han pasado todos estos días y no sabemos qué paso". Enfatizó que la información que les han entregado ha sido ínfima, tanto al momento del accidente como a esta altura de la indagatoria.

Como relató Begoña Chiguay, tía del también atleta, ella fue la primera en recibir antecedentes del grupo que acompañaba a su ser querido.

"Mi hermana -madre del menor- llamó y dijo que 'Nico' murió, sin comentar detalles y cortó. Le avisé a mi madre y a otra hermana. Nos vinimos para la casa y empezamos a llamar, ya que ellos no contestaban. La incertidumbre era muy grande", acotó la joven.

Asimismo, la fuente agregó que las dudas aumentan debido a la cantidad de hipótesis que se manejan de lo sucedido. "Me han contado cuatro versiones, no sé cuál será la verdadera. No tenemos mayores respuestas", acotó.

Sin mayores datos, estos vecinos se trasladaron hasta la Fiscalía de Castro para que intercedan en la entrega de antecedentes. Sin embargo, no hay mayor claridad sobre la dinámica del incidente.

Como especificó Patricia Chiguay, la otra tía del escolar que encabezó estas diligencias, desde el ente persecutor le indicaron que "el Servicio Médico Legal (SML) dio cuenta que falleció por asfixia por inmersión y que existe una orden amplia de 90 días de investigación, para determinar si hubo auxilio".

Estas primeras pericias fueron instruidas por el fiscal adjunto de Nueva Imperial, Jorge Granada, quien solicitó en la necropsia de rigor la toma de muestras para eventuales exámenes de ADN y alcoholemia.

Igualmente, el persecutor precisó que el informe de autopsia debe concluir las causas de la muerte del isleño, como también su data y si hubiese sido posible impedir su deceso con ayuda oportuna.

Acciones

Y en este punto se centran los parientes del niño para interponer una querella por omisión de socorro, contra quienes resulten responsables.

"Quiero que se haga justicia que no quede impune su muerte. El niño no fue auxiliado. No voy a morir tranquila hasta saber qué pasó", señaló la abuela del estudiante, quien viajó hasta Nueva Imperial para materializar esta ofensiva legal en el tribunal local.

8° básico era el curso al que pasó el niño en el Colegio San Francisco del sector Gamboa.

40 minutos de rastreo realizaron los buzos de Bomberos antes de encontrar el cadáver.