Piden ocho años de cárcel por brutal agresión en Quellón
Fiscalía acusa que hombre premunido de una botella atacó a joven de 25 años a la salida de una discoteca, causándole lesiones que le hicieron perder la vista de un ojo y parte de él. La defensa alega que su representado no fue quien hirió a la víctima.
Una pena de 8 años de cárcel pide la Fiscalía de Quellón para un hombre acusado de lesiones graves gravísimas contra un joven al que habría atacado con una botella cercenándole un ojo. El juicio oral comenzará este miércoles y la defensa apostará a absolver a su representado, argumentando que no fue quien agredió a la víctima.
El hecho que será juzgado en el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Castro ocurrió el 17 de marzo del año pasado a eso de las 4.45 de la madrugada, a la salida de una discoteca en el sector Punta de Lapas, al sur de la ciudad puerto.
Según la acusación del Ministerio Público, el imputado de iniciales H.G.O.M. (33) "de manera irracional, sin motivación ni provocación por parte de la víctima, Nicolás Andrés Alvarado Camus, quien se retiraba de dicho centro nocturno en compañía de un familiar y un amigo, lo aborda portando en una de sus manos un elemento contundente, específicamente una botella de vidrio, con la que le propina un golpe en el globo ocular derecho, provocándole laceración en esclera y córnea, con protrusión de vidrio, lo que significó pérdida de visión de dicho ojo".
La fiscal de la causa, Karyn Alegría, subrayó que "pedimos 8 años como pena, no hay agravantes, pero son lesiones graves gravísimas", detallando entre las pruebas las "testimoniales, periciales, los informes pertinentes, el informe de lesiones, la declaración de la víctima y la declaración de testigos presenciales".
Sobre las heridas, la profesional precisó que "tuvieron que sacar parte del ojo y quedó ciego del ojo", catalogando el ataque como "una agresión, no una riña, a la salida de una disco".
querellante
Álex Contreras, abogado del Centro de Atención a Víctimas de Castro (CAVD), es querellante particular en esta causa, señalando que "este caso está dentro del catálogo de delitos que nosotros atendemos, así que hicimos contacto con la víctima y su familia cuando recién ocurrieron los hechos.
De acuerdo a la fuente, "los hemos acompañado en todo el proceso y ellos quieren buscar las mayores sanciones posibles, por eso adherimos a la acusación del Ministerio Público, donde se pide el máximo de la pena que el delito permite".
Sobre cómo ha afectado la agresión a la víctima en su vida cotidiana, Contreras manifestó: "Es la mutilación de un miembro importante como es un ojo, porque él perdió absolutamente uno de ellos, lo que para una persona joven con toda una vida por delante le afecta en lo emocional, en lo sicológico, porque es irrecuperable y visible, así que las consecuencias han sido importantes".
El abogado comentó que, si bien la víctima pudo reincorporarse al mundo laboral, sigue tratando de recuperarse de los efectos negativos que le han significado el delito que sufrió, puesto que todo ello le significa una limitante en su desarrollo como trabajador.
"Al perder la visión de un ojo ya se pierde la visión de fondo y hay una serie de cosas que ya no va a poder realizar, así que es por ello que estamos solicitando la severidad que pedimos", justificó.
"Nosotros queremos que haya una condena y que sea contundente, y de seguro este va a ser un elemento que va a favorecer la superación de los elementos negativos del delito, porque la sensación de justicia siempre es bastante reparadora para las víctimas", recalcó Contreras.
El querellante particular recordó que el imputado tiene antecedentes judiciales anteriores, con varias condenas por delitos contra las personas. Una de ellas es la de homicidio en el 2007 y permanece en prisión preventiva en la cárcel de Castro, aunque se ha pedido su traslado al Complejo Penitenciario de Alto Bonito, en Puerto Montt, por su peligrosidad.
"Es la mutilación de un miembro importante como es un ojo, porque él perdió absolutamente uno de ellos".
Álex Contreras,, querellante del CAVD."
Absolución
Por parte de la defensa, el abogado Daniel Henríquez adelantó que su postura será la "absolución de mi representado", argumentando que "no tiene participación en el delito que se le imputa", junto con mencionar que "habría sido otra persona quien agredió a la víctima".
Agregó el legista que "él estuvo presente en el lugar de los hechos, pero no es responsable de las lesiones graves gravísimas que se le están imputando, no sabemos quién es el autor y es una cuestión que se va a tener que vislumbrar en el juicio".
17 de marzo de 2018, a las 4.45 horas, ocurrieron los hechos, según la Fiscalía..