Secciones

Isleñas se preparan para ser reinas de belleza internacional

Aranzaxú Dimter y Marlene Navarro, de Ancud y Castro, respectivamente, se perfilan como sucesoras de la miss chilota Hil Hernández y están convencidas que a través de distintos concursos pueden aportar a un mundo mejor.
E-mail Compartir

Eduardo Burgos Sepúlveda

Historias de éxito en concursos de belleza para jóvenes de la Isla son pocas, pero contundentes. Entre ellas está el caso de Hil Hernández Escobar, la castreña que a sus 23 años fue elegida Miss Earth 2006, siendo la segunda chilena en ostentar un título de belleza mundial, luego de Cecilia Bolocco.

Desde ese certamen, se ha ido instaurando en el Archipiélago año a año la realización de varias de estas iniciativas, entre ellas, Miss Earth, Miss Mundo, Miss Universo, Miss Teletón, Miss Teenager y otros, que han acaparado la mirada de las isleñas.

Tras los pasos de Hil están ya hace un par de años dos jóvenes chilotas. Son Aranzaxú Dimter y Marlene Navarro, de Ancud y Castro, respectivamente, quienes han destacado en el mundo de las "misses".

En el caso de Aranzaxú, ya pasó por varias de estas competencias, entre ellas el Miss Earth 2018 y el Miss Teleton 2018, donde tuvo destacadas participaciones y actualmente ostenta el título de Miss Belleza Joven del Miss Teenager realizado este año.

La ancuditana de 18 años cuenta que "está ahora todo congelado por mis estudios", reconociendo que "sí quiero seguir participando en concursos, pero por ahora mi concentración está en mi carrera y, obvio no dejo de lado el modelaje".

Resalta la chilota que "actualmente estoy en clases de pasarela y belleza integral con Andrea Díaz, Miss Universo Chile 2018, en Santiago, y con ella en verdad me estoy preparando para el 2023 estar lista para participar en Miss Universo Chile, ya que encuentro que en los concursos actualmente no se destaca solamente la belleza física de la mujer, sino por cómo una piensa y como es como persona, ser capaz de tener una voz propia y defenderla".

Empoderamiento

Contraria a lo que comúnmente se piensa sobre una supuesta banalidad de estos certámenes, la estudiante de Relaciones Públicas sostiene: "Encuentro que en los concursos de belleza chilenos se está logrando llevar el empoderamiento de las mujeres que tenemos actualmente".

Argumentando su postura, Aranzaxú explica que "la gente piensa que dentro de los concursos todas peleamos o perjudicamos a la otra y no es así, nos apoyamos entré nosotras mismas y en verdad es eso lo que me gusta de los concursos, las experiencias que una se logra llevar, buenas y malas, y las amigas que he podido sacar de ellos".

En el caso de Marlene Navarro (18), la historia es parecida. Llegó de casualidad a uno de estos concursos, el Miss Earth 2018. Le gustó el ambiente, la gente que conoció y siguió en ello, perfeccionándose.

De hecho, fue tan buena la participación de Marlene en el Señorita Tierra, que uno de los premios recibidos fue el pase para participar este año en el nacional de Miss Mundo Chile 2019, certamen que se realizará en septiembre, en la ciudad de Calama.

"Nunca me vi en los concursos de belleza, pero la vida me ha encaminado a esto y estoy muy feliz", señala la también modelo, sumando que, desde el concurso se ha preparado en idioma inglés, oratoria, protocolo, pasarela, gimnasio y clases de dicción, dando muestra que se toma en serio su aspiración.

Además la joven se da tiempo para sus hobbies que son el yoga y la danza. "También aprovecho de estar tiempo con mi familia, compartir: hacer todo contadito", confiesa.

Estudios

Si bien, al igual que varios de los jóvenes que quieren destacar en el espectáculo, Marlene está concentrada en ello. También quiere realizar actividades más tradicionales en cuanto a estudios.

"Quiero estudiar algo relacionado con la salud, enfocado principalmente en los niños, porque me fascina trabajar con los niños y de ese modo también ayudar, pero nunca olvidar el ser miss porque me ha abierto muchas puertas y este concurso como tal me ha ayudado a poder desarrollarme y aprender nuevas cosas", relata.

Sostiene la castreña que quiere proyectarse en su carrera de miss: "La vida me ha traído a esto, donde ni siquiera yo sé cómo llegué aquí, pero estoy muy contenta de lo que he logrado, ya que el año pasado me dieron este reconocimiento y a ojos cerrados entré a Miss Mundo".

Al igual que Aranzaxú Dimter dice que estos certámenes no son banales como se les estigmatiza. Marlene sostiene que el concurso donde está participando tiene un trasfondo social. "Tu compartes acá con niños, con familias, haces diversas actividades con la gente y eso, sin duda, me llena el corazón", recalca.

"Siento que este tipo de concursos empoderan a las mujeres y es una plataforma para dar a conocer diferentes problemáticas, para poder mostrarlas", añade, citando entre estas realidades la pobreza y el acceso a la salud.

Lo cierto es que sí, ya en el concurso Miss Earth ganado por la castreña Hil Hernández hace 13 años, además de ser representante de la belleza mundial, fue durante un año una especie de embajadora del certamen en cuando a causas ambientales en el planeta.

En el caso de las dos adolescentes que ahora se perfilan para sucesoras de Hil, pero en los Miss Mundo y Universo, respectivamente, efectivamente tienen aspiraciones de involucrarse en causas sociales.