Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Deportes
  • Clasificados
  • Tiempo Libre
  • Servicios

Indagan muerte y varamiento de ballena jorobada en Chepu

El mamífero fue hallado por lugareños en la playa Tongoy, sector cercano al límite con el Parque Nacional Chiloé, en la zona oeste del Archipiélago. Funcionarios de la Armada y de Sernapesca realizaron los peritajes al cadáver del cetáceo.
E-mail Compartir

Luis Contreras Villarroel

Un ejemplar de ballena jorobada (Megaptera novaeangliae) varó recientemente al sur del sector de Chepu, comuna de Ancud.

El hallazgo del mamífero se realizó por parte de algunos lugareños, específicamente a la altura de la playa Tongoy. Los propios vecinos avisaron del hecho al alcalde de mar de Chepu.

Según lo consignado por el capitán de puerto de Quemchi, Germán Velásquez, con jurisdicción marítima en el área, a partir del varamiento del cetáceo se dispuso del envío de personal naval y del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca).

El jefe naval explicó que "nos pusimos en contacto con el Servicio Nacional de Pesca para entregar más información al centro de varamiento de cetáceos de Ancud para acudir hoy viernes (ayer)".

Velásquez expresó que el animal tiene una longitud de unos 11 metros y que se causa de muerte es indeterminada hasta el momento.

"La ballena va a quedar en el sector, ya que no dificulta ningún tráfico de embarcaciones y no existiría riesgo sanitario", señaló el capitán de puerto quemchino.

Para acceder al lugar del hallazgo los funcionarios de la autoridad marítima y Sernapesca se desplazaron primeramente vía marítima y caminando para llegar al punto de encuentro con el animal.

Se trata de un área de compleja geografía, de acuerdo a lo descrito por la autoridad naval. "Hay que llegar en embarcación y después caminar (...); es lejos y es una zona inhóspita", calificó el uniformado.

SERNAPESCA

Tras 40 minutos caminando por una extensa playa, luego de la respectiva navegación, el equipo de la Policía Marítima y Sernapesca arribó hasta el punto donde está el cadáver de la ballena, realizándose peritajes.

Eduardo Aguilera, director regional de Sernapesca, reveló que la examinación por parte de los especialistas permitió establecer que data del deceso del ejemplar es de unas dos semanas y que ella ocurrió en el mar. Conforme avanzó la descomposición, el cadáver se hinchó y finalmente varó.

"Se estima una data de muerte de aproximadamente dos semanas, por lo que no es posible determinar la causa de la muerte", mencionó el funcionario público.

Aguilera descartó toda posibilidad de enterrar al mamífero debido a la lejanía del sitio y la gran dificultad de ingresar con una máquina para poder inhumarla. "Se va a mantener en el lugar", resaltó.

Un punto importante desde el punto de vista de la protección de estos gigantes transoceánicos se relaciona con la necesidad de evitar su intervención.

El director regional de Sernapesca detalló que "todos los restos de los mamíferos marinos, en especial de las ballenas, son protegidos; por lo tanto, se recomienda no acercarse al lugar ni menos extraer partes del animal, lo que está prohibido y podría significar una sanción".

EXPERTO

La ballena jorobada en su estado adulto puede medir entre 16 y 18 metros, con un peso de hasta 40 toneladas. Este gigante de los océanos realiza largas migraciones entre las aguas costeras tropicales en invierno donde se aparean, paren sus crías y por lo general no se alimentan en esas circunstancias.

Cayetano Espinoza, médico veterinario, doctor en Medicina de la Conservación y coordinador de la ONG Yaqu Pacha Chile, aportó que "en el hemisferio sur las ballenas jorobadas se alimentan principalmente en aguas antárticas, donde su dieta corresponde en forma exclusiva de kril, aunque algunas optan por permanecer en el golfo de Corcovado o el estrecho de Magallanes".

"Aunque la caza comercial produjo la seria declinación de casi todas las poblaciones de ballena jorobada, la mayoría de las poblaciones han aumentado desde el fin de la caza de ballenas, excepto en el Pacífico noroccidental y partes de Oceanía, donde no se ha detectado incremento", sentenció el profesional.

El experto enfatizó que existen diversas iniciativas de desarrollo y protección para este tipo de mamíferos. "Actualmente, existe una gran cantidad de proyectos en desarrollo en el hábitat de la ballena jorobada, como proyectos de extracción de combustibles fósiles con potenciales impactos sobre las ballenas. Estas ballenas también son susceptibles a los enredos con artes de pesca y a la colisión con grandes embarcaciones, las que suelen tener consecuencias fatales", advirtió.

Aunque se han constatado en las últimas décadas notables varamientos de cetáceos en Chiloé, se trata de casos más bien aislados. Uno de ellos se remonta a 2005, con el cadáver de un ejemplar macho de ballena azul aparecido en roqueríos de bahía Pumillahue, en el noroeste de la Isla Grande de Chiloé. Su esqueleto se conserva en el Museo Regional de Ancud.

"La ballena va a quedar en el sector, ya que no dificulta el tráfico y no existiría riesgo sanitario".

Germán Velásquez,, capitán de puerto de Quemchi."