Gobierno por taco en los balnearios: "Cuarentena no son vacaciones"
Numerosos atochamientos vehiculares en los caminos hacia balnearios y pequeñas comunas rurales se registraron durante la tarde del viernes y la mañana de ayer sábado, protagonizados, en su mayoría, por familias de la capital que buscaban llegar a sus segundas viviendas para pasar la cuarentena por coronavirus. Ante ello, y la preocupación de los residentes de estos lugares, el ministro de Salud, Jaime Mañalich dijo que esta medida obligatoria para los casos detectados de Covid-19 "no son vacaciones".
"La cuarentena no son vacaciones", enfatizó el secretario de Estado respecto a los santiaguinos que partieron hacia el litoral el viernes. "Hacemos un llamado a que las personas vuelvan a sus domicilios y que no se trasladen a localidades habituales de veraneo, para no tener que tomar medidas extremas", advirtió.
"Si no hay un cambio de actitud, vamos a tener que poner cuarentenas o barreras sanitarias mucho más estrictas. Ojalá comprendan", dijo el ministro, recordando que en el país actualmente hay 42 aduanas sanitarias, las que exigen comprobar que quienes ingresan a la zona no son portadores del virus.
A la entrada de algunas comunas donde no ha sido impuesta esta medida, los propios vecinos armaron barricadas en el camino para impedir el ingreso de turistas. Al respecto, el titular de Salud expuso que la cuarentena tienen "distintos niveles": el primero es evitar aglomeraciones de personas; el segundo, establecer aduanas sanitarias, el tercero son los cordones sanitarios, y el cuarto es el cierre total de una comuna, región o todo el país.
Cordones sanitarios
Producto de estos viajes a localidades costeras "en las próximas 24 o 48 horas" se podrían implementar cordones sanitarios en dichas zonas, indicó Mañalich, insistiendo en que la medida se tomará si "no tenemos un cambio".
El médico explicó que un cordón sanitario implica que "la gente que vive ahí hace su vida normal, pero nadie entra ni sale. Sobre todo, quienes no tienen residencia permanente en esa localidad no pueden entrar por ningún motivo".
"En el contexto de la alerta sanitaria y el estado de emergencia nacional que nos rige hoy día, las personas (que no respeten la cuarentena) arriesgan presidio (cárcel)", dijo Mañalich. "Esto no es broma: esto implica responsabilidad, y si esa responsabilidad no se ejerce desde las propias personas, hay sanciones contempladas", destacó.
"Hablamos de la salud de los chilenos, del contagio de esta enfermedad entre los chilenos, en la cual queremos hacer el esfuerzo para que la velocidad de contagio sea la más lenta posible para no tener acumulados casos graves" y, por ende, colapsar el sistema público de salud, indicó el ministro.